Dexter 5x08 - 'Take it!': Análisis

Permitidme que me ponga un poco a lo Jordan Chase para hablar del episodio de esta semana de "Dexter". "Cuando ocurre algo tan grande en una historia que hace pedazos toda la estructura que conocemos, todo comienza a reconstruirse tomando otros caminos. Nosotros, los fans, sentimos ese hambre, ese ansia de que la reinvención sea como nosotros deseamos. Pero, cuando se trata de "Dexter", debemos tener fe. ¿La serie nos presenta a un personaje como Lumen? Take it! ¿Un tipo de enemigo diferente a lo que Dexter ha visto antes? Take it! ¿Una serie de tramas que comienzan a entrelazarse para seguro darnos, como siempre, un gran final de temporada? Take it!". Este octavo episodio es probablemente el mejor en lo que va de temporada... y seguro que esto sólo puede ir para arriba. ¡Comentemos "Dexter"! ¡Y recordad que seguimos actualizando por debajo de este post!

¡Tómalo!

El "Take it!" de Jordan Chase no se refiere sólo a bienes, a materiales. "Take it!" se refiere a tomar las riendas de tu vida, se refiere a riesgos, a oportunidades. Y si eres un asesino en serie que tiene el tiempo en su contra para acabar con uno de sus objetivos, el cual se marchará pronto de la ciudad... entonces debes tomar la primera oportunidad que tengas para llevarlo a cabo.

El discurso de Jordan Chase gira en torno al instinto primitivo del ser humano. Habla de las necesidades que nos apremian, del "yo" primitivo que tenemos dentro, que resurge en ocasiones, que nos recuerda que somos animales. Algo que es parte de nuestros genes, pero que se ha visto adormecido a lo largo de la historia, debido al progreso y las comodidades. Jordan quiere incitar a las personas a despertar esos instintos... a dejarlos libres, a hacer lo necesario por satisfacerlo. La enseñanza de Jordan es... que la gente deje libre a sus Pasajeros Oscuros. Y eso es muy peligroso cuando es tomado al pie de la letra por alguien como los amiguetes de Jordan. Muy peligroso.

Consecuencias de Santa Muerte.

Mientras Dexter asiste atónito al sectario fanatismo del circo que rodea a Jordan y que le hace sentirse la persona más normal en esa abarrotada sala, Laguerta tiene que lidiar con otro tipo de circo, el mediático, que está a la caza de información tras el desastre acontecido en el Club Mayan, que terminó con 2 chicas muertas, seis civiles heridos, y un asesino fugado.

Los problemas que se le vienen encima al departamento son enormes, y aunque los agentes se aferran a la esperanza de haber conseguido acabar con Carlos Fuentes y al hecho de que ninguno de los muertos o heridos haya sido por sus balas, pero Laguerta sabe que alguien tendrá que pagar por los hechos, y reprocha a los agentes toda la operación, pareciendo que olvida que fue ella quien organizó y dirigió todo.

La agente Manzón cree que será ella quien sirva de chivo expiatorio, pero Deb le recuerda que todos seguían órdenes, y que debe pagar quien dio esas órdenes. Ángel no parece muy convencio, al tratarse de su esposa, pero Deb se mantiene firme. Estamos viendo a una Debra más dura que de costumbre, y enseguida vemos por qué. No siente el menor remordimiento por haber acabado con la vida de Carlos Fuentes... y eso le preocupa. Cuando habla de ello con Dexter, trata de explicarse, diciéndole que no se siente mal, que no siente nada, pero no cree que su hermano pueda entender lo que ella siente. Lo que no sabe es que él lo entiende perfectamente, y comenta que Harry le dijo que "Hay gente que merece morir", una enseñanza que Dexter ha tomado al pie de la letra... y que Deb comparte, mostrando que hay también un pequeño Pasajero Oscuro dentro de ella.

Laguerta hace llamar a Debra, pidiéndole que corrobore su testimonio para cargar a Cira con la culpa del fracaso. Deb, que es una mujer de principios, se indigna al escuchar eso, ya que no puede permitir que la agente cargue con la culpa de Laguerta. Por desgracia, el honor de Deb es una cualidad que otros no tienen... y acaba siendo responsabilizada por Laguerta ante la opinión pública, y tiene que enterarse por televisión de que ha sido suspendida de empleo y sueldo. Esa injusticia es algo que desata la ira de la agente, que ve cómo sus esfuerzos, todo lo que ha luchado y sufrido para llegar a donde está, son tirados por la borda debido a los errores de otros.

Jodidos por Laguerta.

Tras estar a punto de destruir el plasma de Quinn, Deb va a la comisaría a enfrentar a Laguerta, sabiendo que será su palabra contra la de ella... pero por desgracia alguien más apoyará la versión de la teniente. La primera idea de Deb es que se trata de Angel, y dice, antes de marcharse enfadada, que creía que él haría una buena persona de ella... pero ella ha destruido esa parte de él.

El hecho de haber perdido todo lo que consiguió durante años de esfuerzo deja destrozada a Deb, pero Quinn le aconseja que siga adelante, aguante y demuestre lo que vale.

En ese momento llega Liddy, quien trae nuevas noticias para Quinn sobre Dexter y Lumen. A Deb no parece agradarle mucho el ex-policía, así que se va, no sin antes destacar éste que ambos tienen algo en común... han sido jodidos por Laguerta.

Liddy parece emocionado con la investigación, oliendo que hay algo grande detrás de todo ello, pero Quinn ya no las tiene todas consigo. ¿Es el hecho de que Liddy le está sacando todo el dinero? ¿Es por Deb? ¿O son ambas cosas? Sea como sea, Quinn se niega a seguir financiando eso... pero ya es muy tarde para hacerlo. Ahora Liddy es quien tiene el control de la situación, chantajeando a Quinn. Lo que llevábamos viendo varios episodios, acaba de ocurrir. Se le ha ido de las manos.

Y mientras Quinn se da cuenta del lío en el que está metido, Deb se da cuenta de lo que ocurrió en realidad... que Laguerta compró el testimonio de Cira a cambio de un puesto de detective. No fue Ángel, pese a lo que ella pensaba, ya que él, tras tratar con las familias de los fallecidos, también siente, como Deb, la necesidad de hacer lo correcto. Por eso, aunque seguro le supone problemas con su esposa, apoyará a Debra para que haya justicia.

Fascinación.

Dexter no parece muy interesado en el discurso de Jordan, ya que se queda dormido en mitad, despertando en un momento en que el hombre parece estar casi hablando de él, de lo vacío y sin objetivo que se siente a veces cuando pierde ese "contacto" con su "yo primitivo", con su Pasajero Oscuro.

Mientras Dexter hace esa investigación cercana asistiendo al seminario, tiene a Lumen en casa intentando encontrar algo sobre el pasado de todos ellos, tratando de descubrir qué es lo que les relaciona, sin éxito. Todo lo que consigue es saber que Cole es un violento ex-marine.

Hablando de Cole, enseguida se acerca para hacerle saber que Jordan le ha visto entre el público y quiere hablar con él. Dexter está de acuerdo, y eso le permite observar un poco la zona, preparando sus planes. 

Cuando se encuentra ante Jordan, este revela que conoce toda la historia de la muerte de Rita a manos de Trinity, llegando incluso a conocer el nombre del pequeño Harrison. ¿Por qué tanto interés? Jordan se muestra profundamente fascinado por Trinity, por que un hombre de familia, religioso y trabajador en una buena causa fuese un cruel asesino de larga trayectoria. Una fascinación que Dexter llegó a sentir también en su momento, cuando descubrió que Trinity había podido combinar la familia y los asesinatos con éxito durante décadas. ¿Y qué desea de Dexter? Quiere hablar con él en profundidad para desarrollar una teoría sobre cómo el "yo primitivo" lidia con la pérdida. Jordan, amigo, si supieses lo peculiar del hombre que tienes delante...

El pasado.

En anteriores episodios escuchamos a Lumen comentar que había huído dejando a su prometido plantado en el altar, por miedo a que su vida se convirtiese en algo que no deseaba... por un ansia, un hambre insaciable de algo nuevo y diferente. Una decisión muy mala que le llevó a caer en las manos de esos salvajes que estuvieron a punto de acabar con su vida... no sin antes marcarla para siempre.

Pero que Lumen no quisiese su vida, no significa que su vida no la quiera a ella. Ahora, su ex prometido está en Miami, y le sugiere que se vean. Teniendo en cuenta que no puede salir de la casa de Dexter para no ser vista, será complicado. Pero, por suerte para Lumen, Dexter, al ir contrarreloj y tener que matar a Cole en el mismo hotel donde tiene lugar el seminario, necesita su ayuda con los preparativos, y le encarga comprar el material para la "kill room", lo que le dará una excusa para salir de allí y encontrarse con el chico.

Versionando la famosísima frase que abre el piloto de la serie, Lumen comenta "Tomorrow night is the night", sorprendiéndose de lo rápido que se ha acostumbrado a un mundo tan extraño. Por eso, cuando al día siguiente se reúne con Owen, se encuentra incómoda, descolocada... ese ya no es su mundo, ya no es su vida...

El joven sigue amando a Lumen, por lo que le propone que vaya con ella a dar la vuelta al mundo... que ambos escapen de esa vida pasada como hizo ella. Pero ella no puede hacer eso... porque hay algo dentro de ella de lo que no puede escapar. Algo de lo que necesita deshacerse... algo que necesita matar.

Ayudante.

Dexter regresa al segundo día del seminario, y mientras Jordan se maravilla de sus propios logros hablando con algunos asistentes en el escenario, él aprovecha para escaparse y preparar todo lo necesario para dar caza a Cole. Está aprovechando la única oportunidad que tiene, en un lugar bastante peligroso, y todo debe estar cuidado al milímetro, por lo que mide incluso los tiempos necesarios para adormecerle y arrastrarle a la otra habitación.

Mientras Dex se ocupa de la milimétrica planificación de este difícil asesinato, Lumen ultima las compras del material necesario, pero justo cuando se dispone a regresar, Liddy le tiende una trampa, provocando un golpe entre sus coches, con la intención de conseguir los datos de la chica. Aparte, en ese momento, consigue ver todo el material que Lumen ha comprado. Liddy va estrechando el cerco, y es cada vez más peligroso.

De nuevo, los nervios, debidos esta vez al golpe con el coche, juegan una mala pasada a Lumen, y hacen que la chica se comporte inconscientemente, acudiendo al lugar del seminario, donde Cole podría verla y reconocerla. Ella confiesa a Dexter la proposición de Owen, y él le dice que podría irse si lo desea... dejar todo atrás, aunque parece algo afectado ante esa perspectiva, soltando una especie de suspiro triste. Pero para Lumen ya no hay otra vida que tenga sentido más que la que está viviendo ahora con Dexter, donde esa venganza le llena y le hace sentir mejor. Así que, debido al peligro que podría suponer que salga de la habitación... debe quedarse en ella, y por tanto, asistir al "ritual" del asesinato.

En una simbólica escena, Lumen ayuda a Dexter a preparar la habitación, convirtiéndose en la primera ayudante que él ha tenido jamás. Y Dexter no se siente incómodo con ello, si no que parece verlo bien.

Un lugar seguro.

Cuando finalizan los preparativos y Dexter pone las fotos de las víctimas, Lumen se da cuenta de que lo que Dexter hace no es por ella... si no que es algo que lleva mucho tiempo haciendo.

Pero, antes de que Dexter pueda explicarse más, escuchan que Cole regresa a su habitación, y comienzan a escucharse los desgarradores gritos de una mujer. Inmediatamente todos creemos que Cole está haciendo daño a alguna chica, pero realmente se trata sólo de sexo. Eso impide que Dexter pueda reducir al hombre.

Por desgracia los gritos de la chica traen horribles recuerdos a Lumen, en cuya mente comienzan a retumbar sus propios gritos, su dolor, de cuando estuvo encerrada en manos de esos monstruos. Pero Dexter ve a la chica sufrir y trata de calmarla.

Y funciona. El tener a Dexter de su lado, el encontrarse dentro de ese "lugar especial" aislado con plástico, un lugar en el que uno de sus torturadores encontrará su final... todo eso consigue tranquilizar a Lumen, y la chica consigue, por primera vez en mucho tiempo, dormir. Ya en un nuevo día, Dexter debe aprovechar la única oportunidad que les queda, y por eso regresa al seminario, pidiendo a Lumen que se marche de nuevo a la casa, para evitar ser descubierta.

Toma la oportunidad.

El plan de Dexter continúa como él esperaba... hasta que surge un enorme imprevisto que descoloca todo el plan.

Cuando Dexter se dispone a abandonar el lugar para acabar con Cole, Jordan, por sorpresa, le llama al escenario, para ejemplificar una parte de su teoría. Y, para ello, le pide que reviva el momento de la muerte de Rita, le pide que diga lo que sintió. Y Dexter sintió que todo se desmoronaba, se sintió hecho pedazos.

Según Jordan, cuando el "yo primitivo" se ve destrozado, se despierta un hambre y una necesidad de algo que la sacie. ¿Qué es aquello que la calmará? Para cada uno es diferente... y para Dexter es proteger a alguien, para enmendarse por no haber podido proteger a Rita. Lo que ayudará a Dexter a reformar su "yo primitivo", su Pasajero Oscuro, será ayudar a Lumen a acabar con aquellos que le hicieron daño.

Por desgracia en ese exacto momento no lo está haciendo muy bien (aunque por circusntancias ajenas a él), ya que mientras él está allí arriba del escenario, Cole sigue libre por el hotel... lo que provoca que se cruce con Lumen. Y la chica, aterrada, regresa corriendo al único lugar donde se sintió segura, la "kill room". Pero esa seguridad que siente no es física, y Cole atraviesa la puerta con violencia, para acabar con ella.

El "yo primitivo".

La tensa escena en la que Cole trata de asfixiar a Lumen tiene final feliz cuando un siempre oportuno Dexter aparece para salvar a la chica, su único modo de perdonarse, de superar lo de Rita. Instantes después, ya tenemos a Cole en la mesa, listo para ser despachado.

Pero antes, necesitan interrogarle, tratar de obtener los nombres de los demás implicados en lo que ocurrió con Lumen. Hablan en plural, y teniendo en cuenta que Boyd y Dan ya son historia, eso nos indica que quedan como mínimo dos más. Pero, como era de esperar, Cole no facilita las cosas. Su respuesta, "Huey, Dewey y Louie", o lo que es lo mismo:

Evidentemente, no van a conseguir nada de él, así que su tiempo se ha acabado. Tras obligarle a mirar a las imágenes de las cinco chicas muertas, Dexter continúa realizando su ritual ante una sorprendida Lumen, que no comprende nada sobre la muestra de sangre, que está descubriendo cómo es en realidad ese misterioso hombre que le salvó de una muerte segura.

Y, en ese momento, cuando ella ha visto con sus propios ojos al verdadero Dexter, él decide contarle su historia, lo que ocurrió con su madre cuando era niño, la razón por la que hace lo que hace. Porque matar era lo único que le hacía sentir completo... hasta que asesinaron a Rita, cuando todo perdió sentido, hasta ese momento. Lumen ha devuelto todo a Dexter... pero él aún necesita que ella lo acepte. Como el propio Dex piensa, Miguel Prado no pudo aceptar lo que él era, y tuvo que matarlo cuando se volvió peligroso. Harry (quien por cierto, se mantiene ausente por tercer episodio consecutivo) no pudo soportar ver lo que había creado, y puso fin a su vida. Pero, ¿Y Lumen? ¿Ella podrá?

"Take it, Lumen!". Este pequeño gesto ata aún más firme el lazo entre ambos.


El tiempo se acaba.

Dexter sale del hotel tranquilamente llevando a Cole en varios pedazos dentro de sus maletas, y cruzándose con Jordan a la entrada. Los guardaespaldas están buscando a Cole, sin saber que lo tienen ante sus narices hecho pedacitos.

Jordan, en su línea, se despide de Dexter tratando de darle una charla inspiradora, diciéndole que no deje pasar las oportunidades, que el tiempo corre. "Tick, tick, tick, ese es el sonido de tu vida agotándose". Y vaya si inspira a Dexter... confirmándole que Jordan era uno de los que hicieron daño a Lumen.

"Take it, Dexter", le aconseja Jordan. Y Dexter sabe que no lo dejará pasar. Porque, como destaca al final en sus reflexiones, algunos elementos tienden a unificarse... como él y Lumen. Ahora él la necesita, y ella está tan unida a él, que no puede marcharse. Mientras el ex-prometido de Lumen se marcha, decepcionado, ella se muestra llena de ilusión ante la perspectiva de acabar con Jordan Chase, mientras se deshace de los restos de Cole en el mar. Por desgracia... ese momento tan "íntimo" no lo es tanto, y alguien lo ha retratado.

El implacable Liddy los ha seguido, y ahora tiene unas aplastantes pruebas que seguro no tardará en relacionar con el famoso Bay Harbor Butcher. Esto no tiene buena pinta, no señor...

The Masuka Moment.

En este episodio Masuka no se ha dignado a aparecer demasiado en nuestras pantallas, pero su única frase es destacable.

Vince: "Sí, he visto esa expresión en su cara antes. Alguien va a tener que agacharse y ser jodido".

Masuka profetizó en ese momento, con sus palabras, a su modo, lo que ocurriría con su compañera Debra posteriormente. Aunque sea una sola frase la que dice, el modo de hacerlo y la importancia que tiene después la hacen especial, como siempre.

Opinión.

Siempre es bueno tener fe en "Dexter". Todas sus temporadas tienen un avance gradual que va contruyendo todo poco a poco hasta impactarnos con unos episodios finales espectaculares. Y seguramente esto es lo que ocurra con esta quinta temporada, si sigue al nivel de este "Take it!" o lo supera incluso.

Durante los episodios anteriores hemos visto algunas tramas (Lumen, Quinn persiguiendo a Dexter...) que nos han recordado a algunas de otras temporadas. Este episodio ha sido un punto de inflexión que ha mirado atrás hacia esos momentos, y ha dicho "no, no es lo mismo". Lumen ha ido más allá de donde Miguel Prado pudo llegar. Quinn no ha llegado hasta donde llegó Doakes, pero ha creado un monstruo más peligroso aún que el fallecido agente. Todas las tramas ahora están más hiladas, y vemos que esta quinta temporada ya tiene su identidad única.

Si bien tiene pinta que en próximos episodios volveremos a escuchar hablar del Bay Harbor Butcher, ya todo es suficientemente diferente a lo que ocurrió en la segunda temporada. La presencia de Lumen, la condición de famoso de Jordan Chase, el acoso de alguien como Liddy que parece más interesado en el dinero que en la justicia, la suspensión de Deb... toda una serie de situaciones límite, nuevas, que entrarán en juego en esta recta final de la temporada.

Yo sólo puedo decir que cada semana que pasa se me hace más difícil esperar a la siguiente. Cada paso es más emocionante, y pocas series pueden decir eso en su quinto año. "Dexter" lo hace.

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