The Big Bang Theory 7x15-“The Locomotive Manipulation”: Review

Por Alex Crespo. 

Este capítulo 15 de la séptima temporada marca dos hitos en la historia de The Big Bang Theory. Uno, que es el capítulo número 150 de la serie. El segundo, los que habéis visto el capítulo lo sabéis de sobra…

Aunque todos decimos que odiamos San Valentín, en mayor o menor medida alguna vez nos ha tocado tragarnos nuestras palabras y hemos hecho alguna chorrada ese día sólo por complacer a nuestra pareja, por mucho que nos repateara. Pues eso mismo es lo que le tocado a Sheldon. Aunque visto lo visto en el desarrollo del capítulo, a quien le ha caído la cruz encima ha sido a la pobre Amy. La neurobióloga se desvive por tener una pequeña y merecida ración de romanticismo, tratando de conjugarlo con todas las rarezas de Sheldon, y recibe como premio el ser ignorada de mala manera y ver cómo su novio prefiere pasar la cena con un friki de los trenes en vez de con ella. Reconozco que, aunque de Sheldon ya nada debería sorprendernos, y actúa más como un niño pequeño emocionado ante un nuevo juguete, me ha tocado las narices sobremanera su actitud. Amy se merece mucho más, y no debería conformarse sólo con ese beso que ha desatado las pasiones de los fans de la relación “Shamy”. Que sí, que cierto que ha resultado un gran avance, sobre todo por el hecho de que fuera Sheldon el que lo iniciara, pero para mí no compensa todos los desplantes que le ha hecho a la pobre chica. Los gestos de hastío de Amy durante el capítulo denotan que empieza a estar hasta arriba de la actitud de su novio, y no me sorprendería que los guionistas tiraran por hacer que ésta dejara a Sheldon, aunque fuera temporalmente, como modo de sacudir un poco las cosas en una serie que empieza a acusar demasiado el cansancio de llevar siete temporadas. Queda por ver si el beso de Sheldon supone un cambio en su relación con Amy o si seguirá apodándola con estúpidos nombrecitos. Gollum, hay que tenerlos cuadrados…

Porque pese a lo odioso que me haya resultado Sheldon en este capítulo, es justo decir que el capítulo lo han salvado Amy y él. Para ser un capítulo aniversario, concretamente el 150 de la serie, ha tenido muy poca magia quitando el momento beso. La trama principal del tren ha estado muy por encima de la de Leonard, Penny y Raj, sin que fuera para tirar cohetes. Howard y Bernadette han estado más de comparsa que como protagonistas de su propia trama, pero hay que decir que ese papel de soporte de “Shamy” han estado francamente divertidos, sobre todo la pequeña rubia. Bastante más flojeta me ha resultado la parte de Leonard y Penny con Raj. Pese a que lo más importante ha sido la aparición de Tania Raymonde (Alex Rosseau en Lost, entre otras) como potencial interés amoroso para Raj, me quiero centrar un poco en Penny. No sé vosotros, pero creo que es un personaje que cada vez ha ido decayendo más y más, y que necesita una reactivación urgente. Pareciera como si simplemente se limitaran a presentarla como una paleta semi-alcoholizada que se pasa de mordaz, y todos sabemos que Penny puede dar mucho más de sí. El problema que veo es que con ella se encuentran en un callejón sin salida con la relación con Leonard, que a estas alturas no pueden romper de nuevo, y con el cada vez mayor protagonismo de Amy y Bernadette, su aportación al devenir de la serie se ha convertido en anecdótica e incluso redundante. Al igual que Raj, es un personaje que necesita un revulsivo importante. No sé si la veterinaria Ivette será el revulsivo para Raj, pero lo cierto es que en esta trama, los mejores momentos se los lleva él de largo con sus desmedidas muestras de pasión hacia su perrita Canela. Prefiero a un Raj así que al puching-ball en que se había convertido para los guionistas.

Por las retransmisiones en USA de  Juegos Olímpicos de Invierno tenemos nuevo parón largo, hasta un par de semanas no veremos un nuevo capítulo, así que toca esperar. Para hacer más amena la espera, podéis comentar vuestras opiniones sobre el capítulo en ésta vuestra página. Nos leemos.