V: Entrevista a Elizabeth Mitchell y Joel Gretsch
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Había un tiempo en el que interpretar a un sacerdote en TV era un asignamiento celestial. O interpretabas a un gentil cuidador, como Merlin Olsen en “Father Murphy”, o la voz de la razón contra el caos, como el padre Mulcahy de William Christopher en “MASH". En el peor caso, uno podía ser un poco estafador y ludópata como en la comedia irlandesa “Father Ted”. Pero ahora, tras años de titulares negativos para la iglesia católica, interpretar el papel de sacerdote puede ser un infierno. Eso es por lo que Joel Gretsch está contento de interpretar a un nobre aunque complejo hombre con hábito en el drama de ciencia ficción "V". [Continúa tras el salto].
Gretsch ya no se siente extraño en la ciencia ficción o en eventos como la Comic-Con, tras papales en “The 4400″ y en la miniserie de Steven Spielberg “Taken”. Dice que el Padre Jack Landry es el tipo de sacerdote que recuerda de su infancia en un pequeño pueblo de Minessotta.
El actor, de 46 años, recuerda asistir a campamentos de liderazgo, "y siempre había sacerdotes jugando al softball, estando con el resto, y, ya sabes, haciendo cosas legítimas de lo que se supone que es ser un sacerdote". Él ve el sacerdocio como "algo muy interesante, maravilloso y noble, pero también muy complejo de hacer".
Ese es ciertamente el caso para el Padre Jack en "V". La serie, un remake de una producción de principios de los 80, trata sobre una avanzada especie alienígena que invade la tierra, con enormes naves que flotan sobre 29 ciudades del planeta. Parece que vienen en son de paz pero, mientras la serie se desarrolla, queda claro que sus motivos son más siniestros. Morena Baccarin interpreta a Anna, la bella y carismática líder de los Visitantes, mientras que la agente antiterrorista del FBI Erica Evans (Elizabeth Mitchell, “Lost”) se encuentra entre aquellos que sospechan que estos encantadores visitantes tienen un plan secreto.
El padre Jack es un antiguo capellán del ejército, y es uno de los primeros en descubrir que los visitantes podrían no ser los benevolentes salvadores que dicen ser. La llegada de estos visitantes de otro mundo coloca a Landry en una crisis de fe.
"Es un tío estudiado", dice Gretsch de su personaje. "Para convertirse en sacerdote, lees mucha literatura, y tienes que entender lo que se ha escrito en el pasado sobre Dios y tu relación con él".
Cuando los aliens llegan y empiezan a ofrecer curas para muchos males humanos, eso hace que la creencia de Landry sobre un ser superior se tambalee.
"¿Cómo comparas eso con Dios?", pregunta Gretsch. "Vienen con toda la tecnología para ayudar a la gente, y la gente los mira como salvadores. Es muy molesto para mi personaje".
Otras tentaciones más terrenales están desafiando los votos de Landry, incluyendo su atracción por la agente Evans.
"Jack es un hombre, pero es un sacerdote", dice Gretsch. "Es un hombre de fe, y está arraigado en eso. Pero la intimidad está ahí, y eso es bueno".
Mitchell está de acuerdo.
"La atracción está ahí", dice. "Lo convierte en una relación muy real y compleja".
Aún así, no esperéis escenas de cama al estilo del padre Ralph en "El pájaro espino". Según Mitchell, "Obviamente son dos buenas personas luchando contra esa atracción".
Gretsch dice que "es difícil hablar de ser un sacerdote". Lo encuentra un desafío, porque "toca muchas teclas diferentes".
Se da cuenta que muchos espectadores, especialmente los que leen los titulares recientes, van a enfocar sus propios sentimientos en el personaje, y él considera que eso es justo.
"Yo sólo puedo mostrar lo que tuve en mi vida, cómo me criaron y lo que fue mi relación. Así que es un papel maravilloso y complejo que hacer, y es algo difícil de lo que hablar".
¡Gracias a Elizabeth Mitchell Fan Club!
El actor, de 46 años, recuerda asistir a campamentos de liderazgo, "y siempre había sacerdotes jugando al softball, estando con el resto, y, ya sabes, haciendo cosas legítimas de lo que se supone que es ser un sacerdote". Él ve el sacerdocio como "algo muy interesante, maravilloso y noble, pero también muy complejo de hacer".
Ese es ciertamente el caso para el Padre Jack en "V". La serie, un remake de una producción de principios de los 80, trata sobre una avanzada especie alienígena que invade la tierra, con enormes naves que flotan sobre 29 ciudades del planeta. Parece que vienen en son de paz pero, mientras la serie se desarrolla, queda claro que sus motivos son más siniestros. Morena Baccarin interpreta a Anna, la bella y carismática líder de los Visitantes, mientras que la agente antiterrorista del FBI Erica Evans (Elizabeth Mitchell, “Lost”) se encuentra entre aquellos que sospechan que estos encantadores visitantes tienen un plan secreto.
El padre Jack es un antiguo capellán del ejército, y es uno de los primeros en descubrir que los visitantes podrían no ser los benevolentes salvadores que dicen ser. La llegada de estos visitantes de otro mundo coloca a Landry en una crisis de fe.
"Es un tío estudiado", dice Gretsch de su personaje. "Para convertirse en sacerdote, lees mucha literatura, y tienes que entender lo que se ha escrito en el pasado sobre Dios y tu relación con él".
Cuando los aliens llegan y empiezan a ofrecer curas para muchos males humanos, eso hace que la creencia de Landry sobre un ser superior se tambalee.
"¿Cómo comparas eso con Dios?", pregunta Gretsch. "Vienen con toda la tecnología para ayudar a la gente, y la gente los mira como salvadores. Es muy molesto para mi personaje".
Otras tentaciones más terrenales están desafiando los votos de Landry, incluyendo su atracción por la agente Evans.
"Jack es un hombre, pero es un sacerdote", dice Gretsch. "Es un hombre de fe, y está arraigado en eso. Pero la intimidad está ahí, y eso es bueno".
Mitchell está de acuerdo.
"La atracción está ahí", dice. "Lo convierte en una relación muy real y compleja".
Aún así, no esperéis escenas de cama al estilo del padre Ralph en "El pájaro espino". Según Mitchell, "Obviamente son dos buenas personas luchando contra esa atracción".
Gretsch dice que "es difícil hablar de ser un sacerdote". Lo encuentra un desafío, porque "toca muchas teclas diferentes".
Se da cuenta que muchos espectadores, especialmente los que leen los titulares recientes, van a enfocar sus propios sentimientos en el personaje, y él considera que eso es justo.
"Yo sólo puedo mostrar lo que tuve en mi vida, cómo me criaron y lo que fue mi relación. Así que es un papel maravilloso y complejo que hacer, y es algo difícil de lo que hablar".
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