Sons Of Anarchy 5x10 - “Crucifixed”: Review

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Por Alex Crespo: Diez capítulos vistos, tres para el final. La quinta temporada de Sons Of Anarchy afronta su recta final a toda pastilla ¿Vemos qué nos ha deparado “Crucifixed”?
 
Crucificado. Con este título se nos presenta este décimo capítulo de Sons Of Anarchy. Una crucifixión que a tenor de lo visto en el anterior capítulo, parecía que apuntaba a Juice, pero que finalmente nos ha deparado algo muy distinto a lo que todos esperábamos.

Y es que Juice, pese a sobrevivir al capítulo (venga, en serio ¿quién había apostado a que se lo cargaba Jax?), sigue en una situación de lo más peliaguda, y cada vez va a peor. Debatiéndose entre dos lealtades: por un lado al Club, su única familia, lo único que da sentido a su vida y que puede perder (ambas) por su traición; y por otro a Clay, al que considera como un hermano. Y es curioso cómo las actitudes de ambos respecto a Juice difieren radicalmente: mientras que Jax utiliza la amenaza y el tono duro para tenerle agarrado por los mismísimos y añadir así un nuevo peón a su partida, Clay le proporciona a Juice cariño y amistad para asegurarse su lealtad ¿Chantaje emocional? Sí, y de los gordos, como no puede ser de otra forma con el manipulador number one de SAMCRO, pero veremos cuál de las dos tácticas da mejor resultado. Y yo me inclino por la segunda… 

En ese “reclutamiento” de aliados, Jax consigue un premio gordo: Chibs. El ¿irlandés? ¿escocés? -nunca lo he tenido claro- es puesto al día por Jax y Bobby de todas las movidas en las que está metido el Club: los allanamientos, el caso RICO, la CIA, Juice… Como es lógico, al principio flipa y ve que el Club está muy al borde del precipicio. Pero eso no le va a echar atrás, y menos ahora después de la prueba de confianza que le ha deparado Jax. Desde el principio de la serie hemos visto cómo la relación entre ambos era de las más sólidas dentro del Club, y Chibs indudablemente se va a convertir en uno de los más fieles aliados a la causa de Jax. Y lo demostrará a lo largo del capítulo. 

Venga, vamos a decirlo ya: Jax se está convirtiendo en una persona detestable. En su camino para lograr su objetivo está empezando a pasar por encima de cualquiera, y lo que es peor, sin que parezca importarle. Y lo que me pone de más mala leche es que una de los afectados sea Bobby. El VP trata de ser la voz de la conciencia de Jax, y que éste actúe con sentido común. Pero Jax no está ahora mismo para conciencias ni diplomacias, y se lo demuestra a Bobby de la peor forma posible: destrozando una alianza de más de veinte años con los Grim Bastards (los moteros negros) por su afán de vengar la muerte de Opie. Resulta que uno de los responsables de la paliza mortal a Opie, recién salido de la cárcel, es primo del líder de los Bastards. Claro, por mucho que compartan la pérdida de Jax, la sangre tira y no van a dejar que los Sons le maten. Bobby ejerce de diplomático recordándole la lealtad de los Bastards durante todos estos años, consiguiendo aparentemente apaciguar a Jax y que éste de su palabra a los Bastards de que no van a liquidar al matón. Pero Jax rompe su palabra, y con la mano ejecutora de Chibs, por segunda vez en lo que va de temporada Jax asesina a un tipo desarmado que se ha rendido ante la consternación de los Bastards y del propio Bobby. Evidentemente, no le ha hecho ni pizca de gracia el verse puenteado y el que Jax mandara a hacer puñetas una alianza tan valiosa, y así se lo hace saber. Veo que Bobby está empezando a estar cansado de esta guerra y de la actitud de Jax, un Jax que en vez de actuar con calma y lógica se ha dejado llevar por su sed de sangre. El Jax que conocimos hace tiempo que no existe, y está completando un camino que le está llevando a convertirse el peor Clay. Ese “¿Quién coño eres tú?” que le espeta el líder de los Bastards se lo soltó hace poco el mismo Jax a Gemma. Dos personas irreconocibles en su proceder hasta para sus más cercanos amigos.

Gemma, que en un capítulo en el que no hemos visto a Nero ni apenas se le ha hecho mención –lo que me ha extrañado bastante- ha conseguido por fin (sabíamos que no le iba a costar mucho) meter en la cama a Clay. Otra cosa es que Clay se crea ese acercamiento de la que fuera su “old lady”. Y sabemos que Clay es un tipo muy listo, así que no sé por dónde va a salir la cosa. Al igual que no sé por dónde va a salir la conversación de Clay con Romero Parada. Clay tiene la mosca detrás de la oreja. Se ha enterado de que hay un caso RICO contra el Club ¿Por qué entonces no han caído todavía sobre ellos? Pues porque alguien muy importante lo ha parado. Y ese alguien sólo puede ser la CIA ¿sospecha Clay que Romero trabaja para la CIA? No lo sé, pero por si acaso lo deja caer. Y deja caer su candidatura a colaborar con ellos. Porque deduce que si sigue vivo, es porque le necesitan para negociar con los irlandeses. Así que, ¿por qué tratar con intermediarios –Jax- cuando pueden hacerlo directamente con él? A cambio, le quitarían de en medio a Jax y él volvería a la presidencia del Club. ¿Será cierto que Romero acepta esto como parece? Personalmente lo dudo, pero veremos cómo acaba. 

Otra trama que teníamos aparcada desde el quinto capítulo (el de la memorable aparición de Walton Goggins) es la de los negocios de Jax con el alcalde Hale. El Concejo ha aprobado por fin su plan para el conjunto residencial Charming Heights, pero necesita un inversor. Y Jax se lo proporciona: Damon Pope, quien financiaría la operación urbanística, mientras que el Club se quedaría con todos los contratos de mantenimiento. Ah, la corrupción urbanística, cuánto nos suena en este bendito país. En mi opinión, todo este asunto de Charming Heights (al que los Sons se opusieron de forma frontal en pasadas temporadas) no es sino la trampa que Jax está tendiendo para acabar con Pope. Quien por cierto, le recuerda a Jax su promesa de matar a Tig cuando dejara de necesitarle. Y para el mafioso eso tiene que ser más pronto que tarde. Jax le da su palabra a Pope de que así será, pero ya hemos visto lo que vale la palabra de Jax en este capítulo. 

Crucificados. El capítulo deja bastantes personajes crucificados, sufriendo por su situación y llevando su cruz a cuestas. Crucificado Juice, obligado a traicionar a su amigo para salvar su vida y su parche; crucificado Bobby, quien pierde la confianza de Jax a favor de Chibs para asumir toda la sangre que se avecina; crucificado Tig, con una sentencia de muerte con día y hora sobre la cabeza; crucificada Gemma, sacrificando su relación con Nero por prostituir su cuerpo con un tipo al que detesta. Y crucificada Tara. La principal damnificada del capítulo merced, irónicamente, a una cruz. Un crucifijo de oro que Otto le pide como último deseo, y que utilizará para asesinar brutalmente a la enfermera del Hospital. Una jugada que Otto llevaba planeando desde que Tara empezara a visitarle y que le sirve para dejarla bien jodida. Porque si bien su brutal acción le sirve para invalidar su declaración ante el caso RICO y salvar al Club, también le sirve para vengarse de Jax, al que considera responsable de la muerte de Luann, a través de lo que más duele: sus personas queridas. Tara se va a ver envuelta en una situación muy pero que muy complicada. Fue ella la que le facilitó el crucifijo a Otto, lo que la convierte, involuntariamente, en cómplice de asesinato. Y que la llevará más que probablemente a perder su trabajo y cualquier posibilidad de encontrar otro en otro hospital como el que le habían ofrecido al principio del episodio. Y eso teniendo suerte. Si, efectivamente, si Otto pretendía hacer daño, lo ha hecho a base de bien. 

Las cosas están empezando a acelerarse en esta recta final de temporada. Nos quedan tres capítulos para resolver algunos de los interrogantes que planean sobre SAMCRO -¿qué significa esa pistola que encuentra Juice en casa de Clay?-, y para averiguar qué cadáveres se van quedar en el camino de la vendetta de Jax. Porque que va a haberlos, seguro. Nos leemos la semana que viene. Y no olvidéis dejar vuestras impresiones en los comentarios. 

Música del capítulo habemus. Aquí os la dejo. 

Mike Zito - Roll On
San Quinn - Paid 
Halfway To Gone - American Scumbag  
The Howls - Vacation  
Keaton Simons - Hero & Hell 
Alison Mosshart & The Forest Rangers - Blind Ride

Por Alex Crespo