Game Of Thrones 1x10 - 'Fire and blood' [Season finale]: Review


Diez semanas sólo ha durado la primera temporada de "Game Of Thrones", y diez meses nos esperan para poder ver la segunda. Esa enorme espera puede aplacarse leyendo los libros, pero no tendremos más remedio que estar atentos a toda noticia que salga para saber más sobre cómo seguirá la adaptación televisiva. Pero, de todos modos, aún teniendo fresca en nuestras retinas esta season finale, 1x10 - "Fire and blood", es hora de comentarla. ¿Qué os ha parecido el episodio?

 

La sangre de Ned aún gotea de su espada, Ice, cuando regresamos a King's Landing. Nos encontramos en medio de toda la conmoción ante la repentina decisión de Joffrey, en contra de todos. Yoren intenta sacar a una aturdida Arya de ese lugar antes de que vayan a por ella, mientras Sansa, que pierde el conocimiento, ya no tiene escapatoria.

La pobre Arya, a la que siempre han confundido con un niño por sus modales masculinos y su fascinación por el arco y la espada, ahora encontrará su salvación en eso. Yoren corta sus cabellos, haciendo pasar así a la pequeña por un chico huerfano, un supuesto recluta para la Guardia de la Noche. Así podrá sacar a Arya (o Arry, mejor dicho) de King's Landing sin levantar sospechas.


Pequeña y aparentemente indefensa, Arya no tarda en ser objetivo de los matones que Yoren ha reclutado para la Guardia, pero la chica es más que capaz de defenderse, por su valor y por contar con su espada. Además alguien da un paso adelante para ayudarla: uno de los hijos bastardos de Robert, aquel al que conocimos como aprendiz de herrero, y que ahora seguirá camino hacia el Castillo Negro.


Las noticias de la muerte de Ned, señor de Invernalia, no tardan en llegar a todos los confines de los Siete Reinos. Y no sólo en cuervos. Sus hijos pequeños, Bran y Rickon, han recibido un extraño y significativo mensaje. Un sueño en el que Ned aparece dentro de la cripta familiar... el lugar donde descansan los muertos de los Stark. El padre de Ned, Rickard, quemado vivo por el Rey Loco. Lyanna, hermana de Ned, a la que Robert no pudo rescatar de Rhaegar Targaryen. Y aunque Osha trata de convencer a Bran de que es sólo un sueño... los temores se hacen reales al llegar la carta.

La noticia destroza los ánimos de Robb y su ejército, quienes avanzaban hacia el sur para salvar a Ned. El chico demuestra una furia y odio incontrolables, y una resolución imparable de destruir a sus enemigos. Catelyn sólo se permite flaquear un momento, para luego volver a ser la madre dura y fuerte que cuida de sus hijos en todo momento. Robb puede ser un gran líder, un buen estratega y un luchador, pero también es otra cosa: aún es un chico.


De cualquier modo, esto no ha terminado. Sansa y Arya siguen en paradero desconocido para ellos, y el recuperar a ambas y la venganza contra los asesinos de Ned serán la motivación que impulsará a Robb y Catelyn, y por tanto al ejército que hay detrás de ellos. Un ejército que se niega a someterse a Joffrey y a los pretendientes al trono, Stannis y Renly Baratheon. Un ejército que tiene una ambición que va más allá: recuperar los Siete Reinos para el norte. Un ejército que proclama a Robb como Rey en el Norte.


¿Le quedará grande a Robb algo de tamaña responsabilidad? Hasta ahora ha conseguido una gran victoria al capturar a Jaime Lannister, ese vanidoso y cínico hombre con ganas de hacer comentarios sarcásticos aún cuando está siendo golpeado en la cabeza con una piedra. Y la captura de este hombre tiene inmediatas consecuencias sobre su familia.

En primer lugar vemos que Cersei enseguida encuentra en su primo, aquel que servía vino a Robert, un sustituto para el papel de amante durante la ausencia de Jaime. Con él no compartió útero ni llegó a la vez al mundo, como contaba a Ned, pero no tiene el menor problema en acostarse con el chico. Y Tywin, el poderoso patriarca, empieza a perder el control de la situación. Jaime capturado, los hermanos Baratheon rebelados, uno de sus ejércitos derrotado... las cosas empiezan a volverse contra él, y la decisión de Joffrey de asesinar a Ned no ha hecho si no empeorarlo.

Enseguida los consejeros de los Lannister empiezan a hablar de buscar esa paz que ya parece imposible, de intercambios, de reabastecimiento... pero Tywin sólo desea recuperar a su hijo. Y en ese momento de debilidad, admite que su otro hijo, aquel que siempre fue una decepción para él, es alguien inteligente y capaz. Y como tal, cede al enano su puesto como Mano del Rey, para que ponga su inteligencia al servicio del gobierno de los Siete Reinos.


El odioso y repulsivo Joffrey, por su parte, sigue ganándose el odio de los espectadores. Primero se entretiene ordenando que corten la lengua a un pobre bardo que había hecho una canción satírica sobre la muerte de Robert, y después de eso obliga a la pobre Sansa, quien tuvo que presenciar la decapitación de su padre y ahora ofrece un aspecto débil y enfermo, a ser testigo de algo horrible: la cabeza de su padre clavada en una pica, y la de su Septa, a pocas picas de distancia.


Tratándola como un recipiente para sus hijos, instigando a uno de sus soldados a maltratarla, amenazando con matar a Robb, es normal que al fin la chica despierte de su mundo de cuento de hadas, de príncipes y princesas, y comience a sentir el odio que todos sentimos hacia Joffrey, llegando incluso a hacer la tentativa de asesinarle, que es abortada y pasa desapercibida debido a la intervención de El Perro, quien ademas ofrece un consejo a la chica: "Ahórrate el dolor, dale lo que quiere". Sansa es prácticamente una esclava de ese horrible niño, que parece dispuesto a seguir el camino del que fuese predecesor de su "padre" en el trono, el infame Rey Loco.

Además, el niño tiene como consejeros a unos canallas de cuidado. Meñique y toda su ambición, la cual le lleva a desear hasta el Trono de Hierro. El misterioso y sibilino Varys, cuyas intenciones permanecen oscuras en todo momento, y el farsante Pycelle, un hombre viejo y achacoso, que no lo es tanto en realidad, cuando está con prostitutas.

Las noticias de la muerte de Ned también llegan hasta el Castillo Negro, y Jon cree que es el momento de tomar la decisión de la que Aemon Targaryen le habló en el episodio anterior. O la Guardia, o la familia. Y decide que la familia gana, por lo que parte a la guerra, en busca de su hermano Robb, seguido de Fantasma, pese a la oposición de Samwell.


Y Samwell no va a desistir fácilmente. Su gran amigo, aquel que le protegió y trató de comprender cuando nadie más lo hizo, se enfrentaría a la muerte si se fuese, si desertase. Y le recuerdan que no puede tomar esa decisión ahora... porque ya la tomó cuando pronunció el juramento de la Guardia. La Guardia es su familia ahora... y allí debe permanecer. Y ahora le necesitan más que nunca, porque las cosas se están poniendo feas al norte del Muro. Coaliciones de salvajes, muertos reanimados... horribles peligros llegarán con el invierno. La horrible espera es un tormento... y por eso la Guardia decide salir al ataque, para saber lo que les espera antes de ser tomados por sorpresa. Ellos tienen su propia guerra, sin blasones, sin héroes. Sólo un grupo de gente rechazada que está en la línea de frente, salvando a los Siete Reinos de peligros desconocidos.

Mientras vivimos los primeros compases de las dos guerras en Westeros, la guerra de los Stark y los Lannister y la de la Guardia de la Noche y lo que hay más allá del Muro, Daenerys vive la suya propia, una en la que está prácticamente sola. Ha perdido a su hijo, sólo para conseguir que Drogo quede en una especie de estado catatónico. La hechicera ha acabado así con el hombre que destruyó a su pueblo, con su descendencia, y ha provocado la desbandada del Khalasar. Daenerys ahora está sola, y sólo tiene a unos pocos fieles, encabezados por Mormont, de su lado.


Trata de aferrarse a la esperanza de recuperar a Drogo, aquel hombre a quien fue vendido como esclava y al que llegó a amar y admirar. Ruega que regrese, que despierte, que no la deje sola. Pero no hay solución. Ya no volverá... y decide decirle adiós, hacer que deje de sufrir, darle por fin descanso. Con sus propias manos, da un fin piadoso a su amado.

Esa piedad la extiende a los esclavos, a quienes libera y da la opción de unirse a ella o marcharse. La única que no recibe ese trato es la hechicera, quien arderá en la misma pira que Drogo. Sólo la vida da la vida, la bruja lo dijo, y Daenerys lo toma al pie de la letra. Mientras la vida de la mujer se consume en llamas, ella se adentra en el fuego, su ropa arde, pero su cuerpo sigue intacto.


La noche pasa, el fuego se apaga, el nuevo Khalasar de Daenerys descansa a su alrededor, y al amanecer de un nuevo día, también amanece algo nuevo para ellos. La vida de la bruja se acabó, pero esa vida dio comienzo a tres más, tres seres que sólo vivían ya en leyendas. Tres dragones, nacidos de los 3 huevos que fueron su regalo de bodas. Tres huevos de piedra que el fuego y la magia de sangre hicieron carne. Ahora sí, está claro. Ella era quien llevaba dentro al dragón.



Opinión.

Y este es el punto final de la temporada. Si bien el episodio no tiene un final enormemente impactante como es el del anterior, sí que juega con otro tipo de sensación: la de la épica. Esas dos últimas escenas, la Guardia de la Noche marchando a la guerra y el nacimiento de los dragones entre las llamas nos dicen "aún no habéis visto nada... ahora viene lo grande".
El episodio no da sensación de final de temporada, pero es que en realidad esta primera temporada de "Game Of Thrones" debería más bien ser valorada como un conjunto, como una sola pieza, una historia de 10 horas que disfrutar. Y ahora tenemos que esperar 10 meses para que continúe, para saber lo que ocurrirá con todos estos personajes, para encontrar otros nuevos, para sorprendernos y maravillarnos.

Viendo ese conjunto, la sensación es inmejorable, hemos visto una espectacular producción cuidada hasta el último detalle, y eso es algo que se agradece enormemente. Por mi parte, este no lector va a hacerse, al menos, con el primer libro. Ayudará con la espera.

COMPÁRTELO

Sobre los comentarios:
El equipo de Llegaron Para Quedarse se reserva el derecho de eliminar todo comentario que contenga:
- Agravios hacia comentaristas y/o responsables de la página.
- Links externos sin autorización.
- Cualquier contenido que pueda considerarse inapropiado.

5 comentarios :

  1. Muy bueno, aunque lo que no me ha gustado es que Daenerys conservase el pelo.

    ResponderEliminar
  2. Creo que a nadie que haya leído rpeviamente el libro le ha gustado ese detalle de Daenerys... ¬

    Y... amenazamenor, estás tardando en comprarte los libros jaja. De hecho merecen muchísimo más la pena y la serie luego es como un regalo para los lectores. Pero vamos que los libros le dan unas cuantas vueltas... muchas cosas se han quedado por el camino por tener sólo 10 episodios. Los recomiendo enormemente, y no dejeis que os den spoilers que la historia es tremenda!

    ResponderEliminar
  3. Maravillosa review, me ha encantado.

    Y el último capítulo, si bien no es ni mucho menos tan impactante como el anterior, me pareció muy bueno porque lo deja todo (todas las tramas) en un punto interesantísimo para comenzar la próxima temporada. Sin embargo, a mi el segundo libro me aburrió en buena parte (me gustó más el primero en conjunto), espero que no ocurra lo mismo con la segunda temporada de la serie.

    ResponderEliminar
  4. Buenísimo el capitulo, buenísima la serie y buenísimo el review xD. lástima que sean 10 meses para la segunda temporada, me compraría los libros, pero acá en Chile no hay librerías que lo vendan D: , ya busqué por todos lados, la única forma es comprándolos en el extranjero y el coste es muy alto D: .Tendré que esperar los 10 meses T_T

    ResponderEliminar
  5. Yo no he leido los libros, pero pienso hacerlo ya que la serie me ha encantado y te deja con muchas ganas de seguir viendo qué pasa, siempre ocurre que se pierden detalles y sensaciones a la hora de llevar a la pantalla la historia, pero me parece una gran adaptación, seguro que si siguen por este camino, la segunda temporada no nos defraudará.

    ResponderEliminar