Game Of Thrones: Entrevista a John Bradley-West

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John Bradley-West, el actor que interpreta a Samwell Tarly es uno de los actores de "Game Of Thrones" que descubrió que había sido fichado a través de la red, posteriormente a muchos fans. Desde que se graduó en la escuela de drama, ha conseguido dos papeles de importancia rápidamente. Antes de Samwell, ha sido Giovanni de Medici en la producción del Canal+ francés "Borgia". Tras el salto, podréis conocer un poco más al actor.

¿Cómo te sentiste al conseguir un papel en una producción tan grande sin haber salido aún de la escuela de actuación? ¿Intimidado?

Intimidado quizá es una palabra negativa, pero no puedo negar que era algo enorme. Mirar a la lista de actores y ver a gente como Sean y Mark, gente a la que he visto y admirado desde hace mucho era una emoción aterradora, sólo puedo describirlo así. Sin embargo, creo que tuve mucha suerte de estar en la escuela al conseguir el papel. Me estremezco al pensar en lo aterrador que hubiese sido si hubiese estado fuera de la escuela, sin trabajar y hubiese conseguido este gran papel. Cuando hice la audición llevaba 3 años actuando constantemente, estaba engrasado y entrenado, las técnicas estaban frescas en mi mente, y listas para ser usadas. Es de un valor incalculable tener a profesores con los que hablar del negocio. Me apoyaron increíblemente con sus ánimos y consejos. Si no hubiese tenido eso, estaría a la deriva. Mis amigos también me apoyaron mucho. Pero una vez me acostumbré a todos los ánimos y buenas palabras, me di cuenta de que tenía mucho trabajo que hacer. Ahí empezaron los nervios.

¿Tenías un agente para cuando hiciste la audición, o la escuela os pone en contacto con directores de casting?

La escuela invita a agentes a ver actuaciones públicas y hablar con estudiantes que captan su interés. Tras una de esas actuaciones se me acercaron varias agencias, y encontré a mi agente. "Game of Thrones" fue la primera audición que me consiguió. Tuve que tomarme un día libre en los ensayos de mi obra final, y muy amablemente me lo dieron. Hice la escena de Jon y Sam en lo alto del muro. Estaba un poco asustado, pero se hizo ante una cámara con sólo dos personas más en la sala. Como era la ronda inicial, no había representante de la serie. Fue la siguiente audición la que era más imponente, porque conocí a los productores Frank Doelger y D.B. Weiss, y a la directora de casting Nina Gold. Pese a que lo planeé hasta el último detalle, mi tren fue retrasado, reconducido, lento y horrible. Llegué 20 minutos tarde, pálido, sudoroso y estresado. Intenté que eso no afectase a mi actuación, y de algún modo recuperé lacompostura para la escena, gracias a la amabilidad de Frank y D.B. Salí contento con mi intento. Hice la obra final, terminé la escuela de drama, y estuve un mes esperando. Mi agente me dio las noticias del casting, y tuve que experimentar por primera vez eso, aceptando el trabajo.

Veo que pasaste por muchas obras tragicómicas. ¿La comedia te atrae?

[...] Samwell, como personaje, más en la serie que en el libro, tiene mucha comedia dentro. Durante mucho tiempo su vida es una broma. Cuando habla con Jon de chicas y sexo, es divertido. Algunos de los momentos más silenciosos entre ellos tienen mucho humor. Creo que eso es lo que para Jon es atractivo de Sam. Le ve como alguien con gran humanidad y un humor basado en la inteligencia y la consciencia. Samwell sabe que no se engañará pensando que es quien no es. Decidí al empezar a leer el guión que, con tantas cosas violentas y desagradables era necesaria una atmósfera familiar entre Sam y Jon para encontrar un alivio ligero. Creo que los guionistas lo vieron del mismo modo. Sin embargo debería destacar que el personaje no es uno humorístico. El dolor, el miedo y la miseria de la introducción de Samwell los interpreté con todo lo que pude demostrar esos sentimientos. Es sólo cuando encuentra su ritmo con Jon cuando toma confianza y se permite opinar sobre algunos aspectos de su vida. Esos son los momentos de bonito detalle humano en los guiones, y he intentado proyectarme en eso lo más posible.

¿Leíste la novela durante el rodaje? ¿Te ayudó en tu actuación?

Leí el libro al final del rodaje. Principalmente porque empecé a tener curiosidad sobre la historia completa. Para entonces no había más que yo pudiese aportar a Samwell. Había tomado las decisiones y me mantenía en ellas. Las relaciones fundadas en la actitud y motivación estaban ya grabadas en piedra. Conocía a mi personaje de mi investigación y las pistas que los guiones daban en diálogo y direcciones. Con unos guiones tan buenos, cada sentencia contiene tantas indicaciones como un actor necesita para su actuación. Estudié a Samwell con la atención que merecía. Los guionistas decidieron si quedarse, expandir, descartar, suavizar o redefinir algunos elementos del personaje que aparecían en el libro. Confié en que hubiesen tomado las decisiones correctas respecto a esos elementos, y acepté sus intenciones sobre el personaje y me fijé el trabajar con lo que tenía. A medida que empezó a acercarse el final del rodaje, me permití leer el libro. No conocía los primeros episodios. No estaba en ellos, no los recibí y no estuve en la lectura. Ser capaz de leer el libro sabiendo quién interpretaría a cada personaje fue un lujo. Sus voces salían de las páginas. Como los libros son más detallados en descripción y exposición que los guiones, las decisiones de casting se afirmaron en mi mente. El libro me impactó al pensar en la tarea que tenía la gente de producción y de efectos especiales. George no se limitó en términos de profundidad y número de personajes, en la imponente y específica geografía, y al mismo tiempo una historia profundamente humana y motivacionalmente válida que sólo puede ser aplaudida. Me alegra no haberme metido en el libro antes de tomar el papel, porque así los guiones tienen todo el poder sobre lo que vemos en pantalla. Pero me alegra haberlo leído finalmente porque confirma las decisiones que tomaron los implicados en la serie como correctas. Haré lo mismo con el segundo para llenar los huecos. Es una parte genuina de mi método. Todo el drama está en el detalle, creo. Es sobre tener clara tu intención en las relaciones. Si intentas reflejar todo el mundo de la historia en tu actuación, parecerás arrogante. Reduce cada escena a lo que está ocurriendo en ese momento. Ese es mi modo de trabajar.

[...] ¿Sabes ya a dónde va la historia de Samwell, o te mantienes a oscuras a propósito?

En este momento no tengo ni idea. Creo que es muy pronto para decidir cómo afrontar ciertos elementos de la historia, sean cuales sean. Sé que si empezase a leer la historia ahora tomaría decisiones y elecciones sobre mi actuación y para cuando llegase al momento la emoción y la actitud no serían frescas. Siempre he sido así. Empiezo a actuar en cuanto empiezo a leer, y constantemente revisito los momentos en mi mente para no olvidarlos. Pero a veces los actores cometemos errores. Si me sentase en casa a dirigirme a mí mismo sin nadie que me aconsejase, tomaría decisiones emocionales incorrectas y tendría que cambiarlas. Suena extraño, pero de ningún modo sería capaz de leer el libro sin preparar las escenas. Sea lo que sea lo que venga, estoy muy emocionado. La gente me dice que Samwell tiene momentos y temas muy interesantes que afrontar a medida que avance la historia. Tengo fe en que sea fascinante y merezca la pena esperar.

¿Cómo era para tí un día típico en el set?

Probablemente deba empezar hablando de la amabilidad y generosidad de los actores experimentados. Con los que más interactué fueron Owen, James Cosmo (Mormont) y Peter Vaughan (Aemon). Todos ofrecían valiosos consejos. Eran fascinantes, divertidos y receptivos. Además, su habilidad como actores es impresionante. Algunas de sus escenas son poderosas, quitan el aliento. Ver a esta gente actuar con tanta intensidad y concentración es una vista que hay que conservar. Entre los actores jóvenes de la Guardia de la Noche se formó rápidamente una relación. Primero nos conocimos para ensayar una pelea. Había oído hablar mucho de Kit Harington (Jon Snow) de gente que le vio en “War Horse” y quedaron impresionados. Todos nos llevamos bien enseguida. Estaba un poco preocupado por trabajar con actores más experimentados con mejores pasados, pero no pueden ser gente más centrada y humilde. El período de rodaje en su mayor parte se trataba de esperar para rodar. Eso significaba tener dos o tres días libres. Ahí fue donde me hice amigo de Kit. Estar en el hotel aburridos, hablando sobre la serie y pasando el tiempo. Los días de rodaje a veces eran físicamente o mentalmente agotadores. Sin buena compañía, esos días serían insoportables, pero pronto supimos encontrar el humor y soportarlo bien. Todos sabíamos que éramos muy afortunados de tener esos papeles. Disfruté cada minuto. Sí, el Castillo Negro era un barrizal. Lluvia, barro, piedras afiladas, olor a animales y un frío horrible. Pero trabajar en un entorno como ese realmente ayuda a los actores a sentirse en ese mundo. Un set lujurioso hubiese puesto en peligro nuestra implicación con el mundo. El Castillo es un lugar desagradable. No el set, pero nos daba inspiración para transportarnos allí. Un set, unos actgores y un equipo increíble, y todo ello resulta ser un grab trabajo. Me siento muy privilegiado de ser parte de ello.

Fuente: Westeros

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