Dexter: Declaraciones de Michael C. Hall para The Globe and Mail
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Por @lausodie
Una de las consecuencias del final de Dexter es que la red se ha llenado de
noticias, entrevistas y rumores. Esta vez os traemos unas declaraciones de
Michael C. Hall que recoge The Globe and Mail sobre su primera impresión al conocer al personaje que interpretaría durante siete años, las similitudes que éste comparte con los
niños, y, obviamente, sobre su opinión sobre el esperado final.
Michael C. Hall recordaba en ellas que al terminar Six Feet Under decidió que no quería hacer otra serie de televisión. Sin embargo, llegó hasta él el guión del piloto de Dexter y aunque al principio se mostró reticente puesto que se trataba de otra serie que incluía muchas muertes, luego se dio cuenta de que no podía ignorarlo. Así que leyó el guión dos veces y después leyó el libro en el que está basado. Al cabo de dos semanas pensándolo supo que no podía resistir el reto de hacerlo, un drama con un asesino en serie como protagonista al que admirar. La voz en off y la forma en que Dexter sabía cosas que nadie más sabía le parecieron también irresistibles.
También reconoció que al principio Dexter era como un niño. Recordó que hay
un momento en el que Trinity le pregunta si quiere jugar, porque lo que hace
Dexter es jugar a un juego. Michael defiende que entonces todavía no entendía
que hay consecuencias reales, que otra gente sale herida o que incluso acaban
muertas. Pero para él es como si jugase a un juego secreto y eso es un
territorio muy delicado. Definió a Dexter como un hombre con un niño dentro,
pero que al mismo tiempo es un adulto perfectamente competente, es bueno en su
trabajo diario, pero lo tiene todo separado. Michael C. Hall añade que hace
tiempo que Dexter dejó de ser un niño, pero que quizás quiere volver ahí. Sin
embargo, cuando descubrimos los orígenes de su oscuro pasajero no parecía que tuviese mucho tiempo
para ser un niño, ¿no os parece?
John Doyle, quien tuvo el placer de entrevistar a Michael le contó la
historia de un par de niños de 9 y 11 años que vieron un capítulo de Dexter,
una serie adulta, y que sin embargo adoraron a Dexter. Al preguntarle por qué
creía que pasan estas cosas, Michael C. Hall contestó que de alguna manera
Dexter parece vivir en una especie de fantasía, en un Miami que realmente no
existe y eso le encanta a los niños. Las cosas siempre parecen ir bien para
Dexter, explicaba, puesto que vive en un Miami donde puede colarse en las casas
de la gente y coger sus cosas, o descargar información de sus ordenadores, como
si no existiesen las alarmas o cerraduras más seguras. Es como si Dexter
tuviese poderes mágicos, y para los niños es como si volase por el aire cuando
no le ven hacer las otras cosas que hace. Quizás sea eso, o quizás, concluyó
bromeando, sean los colores tan brillantes de Miami.
En cuanto al final, Michael reconoció estar feliz con él porque hace honor a
la historia aunque los finales siempre son delicados. Comparó el final de Dexter con el de Six Feet Under (tranquilos, evitaremos los spoilers mientras sea
posible), que dejó satisfecha a mucha gente, lo cual es inusual. Del de Dexter dijo que no deja abierta la
puerta a discusiones, y que en su opinión está definido por la temporada
pasada. También añade que será satisfactorio, y que él se siente tan orgulloso
como aliviado.
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