Sons Of Anarchy 7x11 –“Suits of Woe”: Review

Por Alex Crespo: Llegó la hora de la verdad. La hora de la verdad para Juice. Para Gemma. Y sobre todo para Jax. Capitulazo, ladies and gentlemen.

Tras unos cuantos capítulos en los que la sensación generalizada que me quedaba era de decepción, por fin tenemos el Gran Capítulo, de la temporada y casi de la serie. Un capítulo que por su contenido e intensidad mantiene muchos paralelismos con ese histórico capítulo de la confesión de The Shield, la serie pariente lejana de esta Sons Of Anarchy (si no la habéis visto todavía ya le estáis poniendo remedio). Por primera vez en mucho tiempo, yo diría que casi desde que arrancó la serie, la interpretación de Charlie Hunnam me ha resultado convincente, he logrado compartir realmente el dolor que su personaje debía estar sintiendo. Porque tras el bombazo de Abel, era lógico que atara cabos ya de una puñetera vez, sobre todo a la hora de caer en que Juice era la clave de todo y el único que podía sacar a la luz toda la verdad. Y efectivamente, en esa sala de visitas Jax obtiene la dolorosa verdad que todos conocemos y que da un vuelco a todo lo que Jax creía saber hasta ahora. Que en realidad era muy poquito, y todo basado en la mentira. Una mentira que ha causado la pérdida de muchas vidas, empezando por la más trágica de Bobby y llegando hasta la de Henry Lin, de quien Juice se hace cargo tras que los muchachos de Tully se lo dejaran empaquetadito y preparado para el matadero. Como digo, demasiadas muertes, demasiado sufrimiento, y todo basado en el engaño de Gemma y la sed de sangre de Jax.

La escena de la confesión destaca, aparte de por todo el significado y la importancia de lo que allí sucede, también por la actitud de Juice. Un Juice que tras haber cumplido su parte del trato y haber liquidado a Lin tras que este revelara el nombre del traidor, ya se sabe muerto en vida. No sorprende por tanto la tranquilidad con la que actúa, tanto a la hora de revelar todo a Jax como cuando está con Jarry y Unser. Tras todo lo que ha tenido que vivir y padecer, la muerte se asoma como un alivio más que como una tragedia para el puertorriqueño. Al igual que me ha pasado con Charlie Hunnam, Theo Rossi ha mostrado en este capítulo que cuando se dan las circunstancias apropiadas sabe dotar a su personaje de una personalidad propia que no siempre hemos tenido la suerte de ver. Entre ambos componen una de las mejores escenas de la serie, en la que la tensión de Jax contrasta perfectamente con la casi frialdad de Juice, en un juego de inversión de roles que funciona a la perfección. A esto tenemos que añadir la escena final de Jax derrumbándose ante Nero, dos hombres devastados por la misma mujer. Porque Jimmy Smits también lo borda este capítulo, aunque esto no debe suponer una sorpresa para nadie que haya seguido mínimamente la carrera de este gran actor desde sus tiempos de La Ley de Los Angeles. Por supuesto, aparte de la labor de los actores, gran parte del mérito del tremendo capítulo que hemos tenido habrá que atribuirlo también a la dirección de Peter Weir, Charles Barovsky para los amigos de SAMCRO.

Por cierto, Barovsky es quien traicionó al Club revelándole a los chinos la ubicación de las armas robadas. Una vez descartado Juice, era el único sospechoso viable que quedaba. Lo que por sitúa en un más que considerable aprieto a Jax frente a Indian Hills y las demás secciones de Sons Of Anarchy, y lo sabe. Vamos, que el futuro de Jax en SAMCRO pinta más que negro, si es que tiene algún futuro, claro. Porque tal y como va la cosa, no me sorprendería que Abel y Thomas acabaran creciendo junto a Wendy y a Nero en la granja de éste. Obviamente, quien ya no tiene ningún futuro en Charming es la causante de todo este drama. Gemma se tiene que dar a la fuga cuando todos los acontecimientos se desencadenan, como no puede ser de otra forma, despidiéndose de los pocos seres queridos que le quedan. Particularmente impactante es ese momento con Nero mientras éste se va enterando de todo por teléfono de boca del mismo Jax, aunque he de decir que sentí más el terror por parte de Gemma en el capítulo en que Happy y Ratt se la tienen que llevar a la cabaña sin que ella supiera el por qué. Ahora queda por resolver en estos dos capítulos cómo será su final y cómo harán para que vuelva a Charming para la confrontación final con su hijo. Porque el final de la serie no puede ser otro, señor Sutter. Hablando de Sutter, la mayor crítica que se le puede hacer a este capítulo es que hayamos tenido que esperar tanto para ver algo así, teniendo que tragar relleno vacuo entre medias con capítulos que no aportaban nada en una temporada final. El ritmo de la temporada hubiera funcionado mejor con dos o tres capítulos menos. Pero ya está hecho. Y sólo podemos intuir que lo que queda va a ser tan o más intenso que lo que hemos visto en este. Porque señores, sólo nos quedan dos capítulos de este Final Ride. Así que ya podéis agarraros a vuestros sillones porque la cosa va a ser movidita. La guarrada, que tenemos que esperar hasta el 2 de diciembre para poder ver la recta final.