Community 4x06 - "Advanced documentary filmmaking": Review

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Casi hemos llegado al ecuador de esta reducida y peligrosa cuarta temporada de "Community", y lo hacemos con un episodio, "Advanced Documentary Filmmaking", que trata de recuperar uno de los estilos más exitosos de la serie, el formato documental que nos ha dejado dos grandes episodios en años anteriores. ¿Cuál es el resultado?

Podemos decir que Abed se ha ganado con creces su paso a la clase avanzada de rodaje de documentales. Esta, "Changnesia", es su tercera producción, y, al igual que las dos primeras, comparte una temática: la enfermedad.

 

Allá por la segunda temporada, Abed documentó los supuestos últimos días de vida de Pierce, con aquel memorable "Intermediate Documentary Filmmaking" que parodiaba el estilo de algunas de sus comedias hermanas, como "The Office" o "Parks And Recreation". Un año después, "Documentary Filmmaking: Redux" nos trajo un brillante homenaje a "Hearts Of Darkness: A Filmmakers Apocalypse", que documentaba el rodaje de "Apocalypse Now". En ese episodio, uno de los mejores de la serie en mi opinión, seguíamos el descenso del Decano a la locura, al Corazón de la Oscuridad, cuando trataba de rodar un anuncio para publicitar Greendale.

Ahora, la serie, en su temporada más dudosa, trata de igualar esos dos grandes momentos de su historia, con la cámara de Abed siguiendo al controvertido Chang Kevin. ¿Qué tal lo hace?

El Decano encarga a Abed la creación de un documental sobre la nueva pero preocupante enfermedad, buscando así conseguir una beca del Instituto Neurológico MacGuffin (grande el nombre elegido, que define a una excusa argumental que motiva a los personajes y desarrollo de una historia, y que en realidad carece de relevancia por sí misma). Pero Abed, quien probablemente en un juego de rol siempre sería el neutral puro...

...trata de hacer un documental lo más objetivo posible, para lo que contará con "expertos" en la materia...

...y expertos en oponerse a materias.

Sorprendentemente, todo el mundo se ha tragado el cuento de la Changnesia, excepto Jeff, quien no olvida el golpe de estado de Chang y su dictadura sobre la universidad. El resto creen que Chang Kevin es adorable debido a esa actitud en la que todo parece nuevo para él. Por lo que Jeff adopta el enfoque de "Si no puedes con tu enemigo..." y manipula al resto para dejar en evidencia a Chang ante el comité McGuffin.

Poner a Pierce presentando un evento con marionetas racistas es un buen comienzo. Apelar a los estudios forenses de Annie para que, junto a Troy, y bajo los nombres de Partner y Houlihan, se embarquem en una investigación sobre los pasos de Chang antes de regresar a Greendale (y de paso hacernos recordar el gran "Basic Lupine Urology") es otro gran paso. Pero confiar una cámara a Britta y sus legendarias habilidades para la fotografía y la grabación... esa es la puntilla, el detalle necesario que consigue el material idóneo...

...para que el plan fracase...

Y es que los desesperados intentos de Jeff hacen que el comité del instituto McGuffin considere que la Changnesia, esa enfermedad con la que todos están tan sensibilizados de repente, tiene que enfrentarse a horribles obstáculos de la sociedad, por lo cual les entregan el dinero. Y Jeff, ante "el fracaso mejor documentado de su vida", y al darse cuenta de que él se convirtió en cierto modo en Chang (aunque sin matar a nadie, algo que nadie parece recordar), decide dejar su cruzada solitaria y aceptar la historia de Kevin.

Y ahora que nadie sospecha de él, la segunda parte del plan de Chang (por que sí, es Chang, no creo que nadie lo dudase), comienza. ¿Y quién es ese misterioso interlocutor del que espera nuevas instrucciones? ¿Serán los malvados supervillanos de City College? Seguro.

"Advanced Documentary Filmmaking" es un descarado intento de recuperar una de las viejas fórmulas que mejor han funcionado en la serie en años anteriores. ¿Es eso malo? Para nada si se hace bien, y por suerte, este es el caso. Se trata de un episodio divertido, y quizá de los seis de esta cuarta temporada es el que mejor transmite ese espíritu que buscamos en la serie.

Sí, aún hay cosas que parecen fallar, como que los chistes en ocasiones resultan menos naturales o más tópicos de lo que solía ser, o que la personalidad de "Kevin" parece ser un desperdicio del talento de Ken Yeong, pero lo cierto es que poco a poco la serie vuelve a sentirse como era, y nos da la confianza de pensar que los nuevos showrunners sólo necesitaban un poco de tiempo para habituarse. Buen capítulo, y esperemos que sea la antesala de algunos mucho mejores.