Sons Of Anarchy 5x11 “To Thine Own Self”: Review

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Por Alex Crespo: A contrarreloj. Así parecen ir todos los personajes de Sons Of Anarchy. Y no me extraña. Porque se les echa el tiempo encima. A ellos y a nosotros, porque ya sólo nos quedan dos capítulos para llegar al final de esta estupenda quinta temporada.

El reloj corre para Jax, quien está más irritable que nunca, gritándole a todo el mundo, desde su abogada a sus más cercanos aliados. Da la sensación de que todo se le va de las manos. Primero lo de Tara, quien gracias a Otto tiene serias posibilidades de acabar en la cárcel. Una Tara quien le pide a Jax ya su quid pro quo. Ella accedió a quedarse en Charming por él hasta que resolviese sus asuntos, pero ahora la oferta de trabajo que se le presenta es demasiado tentadora como para dejarla escapar. Y ello implica que Jax debe acelerarlo todo aquello que tan meticulosamente estaba trazando. Pero no sólo por ella: el cierre del caso RICO, si bien por un lado libra al Club de la espada de Damocles que pendía sobre su cabeza, por otro deja expuesto a Jax. La CIA no va a dejar que SAMCRO se salga tan fácilmente del negocio de la droga como Jax pretende mientras siga pendiente el tema de los irlandeses. Romero Parada es muy explícito con eso. Tanto como para secuestrar a Jax al más puro estilo cartel y recordarle el poder que tienen. El intento de sustituir a Jax por Clay en el trato no ha funcionado, aparentemente por los propios ¿reparos? de Clay, quien revela a Jax que sabe la verdad y le advierte sobre las intenciones de Parada. Personalmente me cuesta creer este arrebato de sinceridad de Clay, quien es más que evidente que tiene una agenda oculta como le insinúa a Tig.

Jax está en una situación más que complicada, pero como casi siempre, ya se había asegurado de tener su as en la manga. La solución pasa por ofrecerle  la CIA una alternativa viable, en la que ha tenido trabajando a Chibs y Bobby todo el capítulo: los Mayans y los Niners (con Damon Pope detrás) se encargarán de la distribución de la coca, y los chinos serán los que les suministren las armas al IRA Auténtico. Y así, de golpe y porrazo, los Sons Of Anarchy se libran de la amenaza del caso RICO, del negocio de la droga y del tráfico de armas. El sueño por el que Jax, y antes su padre John Teller, llevaban trabajando todo este tiempo. Ahora SAMCRO es “legal”: su financiación les vendrá del taller, del porno y del burdel de Nero. Tiempo de revelarle toda la historia al Club y de pasar página. Demasiado bonito me parece todo, y estoy convencido de que esta historia está lejos de terminarse, y menos con dos capítulos todavía por delante y al menos otra temporada más confirmada.

Resuelto el tema CIA-cartel, ya por fin Jax puede ocuparse del cabo suelto que le quedaba: Clay. Y gracias a la presión ejercida sobre Juice, ya tiene las pruebas que necesitaba para acusarle de los allanamientos ante la mesa. Pero todos sabemos que Clay tiene más vidas que un gato, y que honestamente, sin él la serie pierde mucho sentido.  Y justo cuando más cerca le tiene Jax, se le escurre de entre las manos gracias, de nuevo, a la torpeza de Juice que le deja solito para deshacerse de los documentos que le incriminaban, lo que le vale un sonoro puñetazo (y gracias que no haya sido más) a Juicy. Desolación de Jax, y cabreo monumental de Bobby, quien está más que harto de la guerra personal de Jax contra Clay. Y ante ello, Jax les cuenta a los presentes Chibs y Bobby la verdad sobre Clay. La auténtica verdad: que mató a John Teller. Por fin todo sale a la luz. Y es por eso por lo que la escena final nos deja a cuadros (como suele ser habitual). Y es que Bobby, el verdadero tapado del capítulo, después de conocer todo esto, se dirige a casa de Clay. Y cuando éste le pregunta si ha venido a matarle, Bobby se nos descuelga con un “estoy aquí para mantenerte con vida” que nos sorprende a todos y hasta al mismo Clay. ¿Ha traicionado Bobby a Jax? Desde el principio Bobby ha sido siempre el más reacio a utilizar la violencia más que cuando era plenamente necesario, y este movimiento encajaría con esa personalidad. Pero mi teoría es otra. Creo que Bobby está haciendo lo mismo que Jax le pidió a Gemma: ganarse la confianza de Clay para conseguir las pruebas en su contra. Claro que mi fiabilidad como pronosticador es nula, así que veremos por donde van a ir los tiros.

En cada capítulo de Sons Of Anarchy siempre hay personajes que quedan claramente damnificados. Y en este vuelven a ser Tara (obvio) y Nero. A Nero no le dejan ni un día de tranquilidad. La alegría por la inauguración del nuevo local de Diosa se ve enturbiada por la aparición de su antigua banda, exigiéndole poder utilizar el local para sus trapicheos de armas. Tanto Nero como Jax se niegan, dado que quieren que sea un negocio legal y no verse envueltos movidas delictivas. Así que para aplacarles, Jax les ofrece venderles unas cuantas armas que tiene en stock. Parece que esta banda de mexicanos no se distingue especialmente por su alto coeficiente intelectual, y no se les ocurre otra cosa que intentar tenderles una emboscada a los Sons en el momento de la entrega. Excusa perfecta para que Sutter nos meta otra escena de persecución y tiroteo a ritmo de Metal de esas que tanto le (nos) gustan. Total, que Jax y los suyos escapan ilesos salvo algún rasguño llevándose por delante a unos cuantos mexicanos, y Nero coge un cabreo considerable. Cabreo acentuado cuando cree que han sido ellos los que han secuestrado a Jax (que sabemos que ha sido la CIA). Y con esas, Nero irrumpe cual Rambo en la guarida de los mexicanos buscando a Jax y matando a dos de su antigua banda. Claro, cuando se entera de que Jax está sano y salvo y que su banda no ha tenido nada que ver, le entra un ataque de pánico comprensible ante la certeza de que se ha ganado la venganza de los mexicanos por nada. Y si encima le añades que descubre que Gemma ha vuelto con Clay, pues su estado de confusión y nerviosismo es comprensible, por mucho que Gemma trate de indicarle que la cosa no es lo que parece. Nero se une a la lista de “cadáveres futuribles” que deja la serie, cada vez más amplia.

Y Tara. Si a un futuro judicial no demasiado halagüeño se le une un misterioso personaje con una curiosa fijación por las personas envueltas en el asesinato en la enfermería de la cárcel, pues apaga y vámonos. Personaje (no hace falta ser un Sherlock Holmes para intuir que se trata del marido o hermano de la enfermera asesinada) que tras una primera visita “de cortesía” a Otto con la sana intención de reconstruirle la cara a leñazos, jura hacerle imposible la poca vida que le queda al casi invidente encarnado por Kurt Sutter. Una nueva trama más que se incorpora a este final de temporada. Y me da que Tara lo va a tener complicado para obtener ese trabajo tan prometedor…

Dos capítulos, dos, para acabar. Y a mí, que al principio era partidario de finalizar la serie por todo lo alto en esta temporada, casi me va dar pena que se acabe ya tan pronto ¿Y a vosotros?

Musiquita del capítulo por aquí. Buena y variada como siempre:

Ocha La Rocha - Heavy

Supafly inc -Happiness

The Good Looks – 18 Summers Old

Keaton Simons – Just This Side Of Insane

Toxic Holocaust - Bitch

Michael Sackler Berner – True Blue

Leopold & His Fiction – Ain’t No Surprise

Quacker City Night Hawks – Some Of Adam’s Blues

John Moreland - Heaven