Dexter: 7x01 - 'Are you...?' / 7x02 - 'Sunshine and frosty swirl': Review
Se nos ha hecho un poco tarde, así que, a pocas horas de la emisión del
7x03, les traemos juntas las reviews de los dos primeros episodios de
esta séptima temporada de "Dexter", 7x01 - "Are you...?" y 7x02 - "Sunshine and frosty swirl". ¿Qué les han parecido estos dos capítulos?
Cuando Dexter y Debra nos dejaron en
Diciembre de 2011, nos hicieron contener la respiración. El silbido y el
reflejo de una cuchillada, el último aliento de Travis Marshall, el
terror en los ojos de Debra, y el mundo de Dexter desmoronándose. "Oh
God", fundido a negro, y nos preguntamos, ¿y ahora qué?
Nueve meses después, comenzamos a dar los primeros pasos para conocer esa respuesta.
· "Are you...?"
parte (tras intentar engañarnos por un momento) inmediatamente tras ese
instante, y vemos, para disfrute del espectador, a una aterrada Debra
tratando de asimilar lo que ha visto, de encontrar explicación a esa
escalofrinte escena. Vemos a un Dexter acorralado, que trata de negar lo
evidente, quien trata de achacar lo ocurrido a un momento de
enajenación.
Pero
Debra no es estúpida, y no tarda en atar cabos. La preparación, el
ritual, nada de eso es impulsivo ni espontáneo... y, por si fuese poco,
le trae algunos recuerdos de uno de los momentos más horribles de su
vida: cuando estuvo a punto de ser asesinada por Brian Moser, el Ice
Truck Killer.
Normalmente la serie
pone las decisiones morales más complejas sobre la espalda de Dexter,
pero ahora él no tiene nada que decidir, simplemente está a merced de su
instinto de autoconservación. Por eso, la pelota pasa a Debra, y es a
quien vemos sufrir las consecuencias de lo ocurrido. Es quien debe
digerir un horrible momento que, cuantas más vueltas le da, más hace
tambalearse sus creencias y su confianza en su hermano, es quien se
encuentra en medio de un dilema que le atormenta.
Pero,
no creamos que Dexter está tranquilo. Su mundo, el que ha construido
con tanto cuidado y dedicación, comienza a tambalearse. Necesita
recuperar el control, necesita un momento en el que él sea el que está
al mando. Necesita una kill room. Y por eso, cuando Mike Anderson es
asesinado, Dexter emprende una frenética carrera para acabar con la vida
del tirador.
El tiempo se
acaba, el hombre se escapa, y Dexter una vez más se ve obligado a
improvisar y tomar riesgos, algo que, con Travis, ya le ha costado muy
caro. Cediendo el control al Pasajero Oscuro, lleva a su víctima a la
sala de equipajes perdidos, y allí, como siempre, desnuda sus
pensamientos. Admite que lo que le mueve a acabar con las vidas de esos
criminales es el ansia de control... pero de nuevo hay algo que se le
escapa... las consecuencias de sus actos que quedan fuera de su alcance,
y que aparentemente este año tendrán forma de mafioso ucraniano.
En
cuanto al resto de personajes, nos encontramos principalmente con
LaGuerta, quien descubre la muestra de sangre de Travis, lo cual
inevitablemente le trae recuerdos del Bay Harbor Butcher. Todo el
departamento está centrado en dar caza al asesino de Anderson, y al
mismo tiempo Louis emprende una venganza contra Dexter que no hará si no
complicar las cosas. Pero... el foco del episodio claramente está sobre
Dexter y Debra.
Mientras Dexter
sigue los dictados de su Pasajero Oscuro, se deshace de Viktor y
comienza a pensar, más tranquilo, en que todo puede arreglarse, Debra
trata de lidiar con el tema a su manera. Ella también tiene su propio
instinto: el de detective. Y aunque intenta distraerse, calmarlo,
mantenerlo callado, es más fuerte que ella, y acaba registrando la casa
de Dexter y encontrando cosas aterradoras.
Harry
dijo una vez a Dexter, cuando eran niños, que jamás podría decir la
verdad sobre él mismo a Debra... porque eso la destrozaría. Pero no
contó con algo como esto. Un Dexter más humano, más descuidado, que ha
sido descubierto. Y, delante de una colección de cuchillos y otra de
muestras de sangre, tiene lugar esa conversación tan temida y deseada. "¿Eres... un asesino en serie". "Sí".
"Are
you...?" resulta un impactante y prometedor comienzo de temporada que
seguro devuelve la fe a aquellos que dudaron de la serie en la sexta. Se
dijo que los guionistas no tenían agallas, pero han afrontado la trama
del descubrimiento sin miedo alguno, avanzando hasta un punto que seguro
no esperábamos tan pronto.
El
episodio puede tener puntos criticables, como el dudoso asesinato en el
aeropuerto, pero, por otra parte, seamos sinceros, el realismo estricto
y la recreación meticulosa de las kill room dejó de ser importante en
la serie hace mucho tiempo, y claramente ahora el centro de todo es la
relación dentre Debra y Dexter y el explorar las consecuencias que este
giro ha tenido para ellos. Sí, hay algunas situaciones forzadas y
tomadas por los pelos, pero están al servicio de algo mayor: la historia
y la evolución de sus personajes.
Y eso se ha hecho de modo impecable, con un episodio cargado de tensión y emoción (no recuerdo uno así desde aquel "My bad"
que abría la quinta temporada), en el que no podemos olvidar mencionar
las impresionantes interpretaciones de Michael C. Hall y Jennifer
Carpenter, así como detalles como el flashback de la infancia que
aportan mucho al conjunto de la historia.
· "Sunshine and frosty swirl"
comienza de modo similar al primero, aunque esta vez quien corre es
Debra, huyendo de la horrible revelación sobre la vida secreta de su
hermano. La situación es muy violenta, y ninguno de ellos sabe cómo
lidiar con ello. Para Debra es un duro golpe descubrir el oscuro secreto
que Dexter y Harry compartían, y para Dexter tampoco es fácil ver el
dolor de su hermana.
De todos
modos, Dexter trata de defenderse, de justificar sus actos, sus
asesinatos. Es su vida, su código, sus convicciones. Pero Debra, o la
Teniente Morgan, también tiene las suyas. Y ambos mundos, ambos códigos,
colisionan en una mirada de esas que matan... y luego en un puñetazo.
Y
aunque esto debería ser el principal motivo de preocupación para
Dexter, no lo es. Algo distrae su atención enseguida, cuando ve que la
mano del Ice Truck Killer está en su casa. Ahora, cazar a aquel que le
ha enviado eso se convierte en su obsesión.
Al
mismo tiempo, Debra, releyendo unas viejas palabras de Lundy, comienza a
creer que el Pasajero Oscuro de Dexter, su ansia de matar, es parecido a
una adicción, y tratará de ayudarle a dejarlo. Para ello, estará
constantemente encima de él, y establecerá una serie de reglas, tratando
de crear un nuevo código para su hermano.
Esta
nueva situación nos permite asistir a escenas tensas, poderosas, muy
bien actuadas, y nos permite descubrir detalles como cuando Dexter
describe cómo son esos impulsos que comienzan con la sangre y terminan
con esa imparable necesidad. Una necesidad que ni todas las hermanas
tenientes del mundo podrían detener, especialmente cuando Dexter
descubre que es Louis quien le está acosando.
Por
eso, intenta desesperandamente encontrar "huecos" en la vigilancia de
Debra para así terminar de una vez con todas con esa molestia (o tal vez
amenaza, como vemos debido a su insistencia pese a las advertencias de
Dexter) que supone el becario. Para ello, llega a cruzar dos extremos:
el primero, drogar a Debra. El segundo, disponerse a asesinar al chico,
quien, desde luego, no se ajusta para nada a lo que dicta su código,
pero que serviría para satisfacer la imparable sed de sangre.
Aunque
en principio parece tomarlo a broma, o como una molestia, finalmente
Dexter hace uso de la "segunda regla" de su nuevo código, el código de
Debra, y cuando siente ese impulso, llama a su hermana para que le
detenga. Esta primera vez funciona, y Louis sobrevive, pero... ¿quién
sabe lo que ocurrirá la próxima vez?).
Casi
cada temporada, a principios de la misma, Dexter cruza su camino con
alguien que le hace replantearse algún aspecto de su código, de su
tapadera, de su vida, de su modo de actuar. A esa lista, junto a Lila,
Miguel Prado, Trinity, Lumen, el Ratoncito Pérez y el Hermano Sam, quizá
debamos sumar a un nuevo "punto de influencia": Wayne Randall.
Randall
es un asesino convicto quien, aparentemente, se arrepiente y confiesa
varios asesinatos sin resolver para "limpiar su conciencia". Ahora que
Debra conoce su secreto, Dexter se plantea algo que nunca se había
planteado: ¿Qué haría si le capturan? ¿Qué haría si terminase preso,
incapaz de satisfacer su Pasajero Oscuro? Ver al hombre aceptar su
condena le hace reflexionar, incluso plantearse si él podría soportar
eso, pero cuando descubre la verdadera intención del hombre, la de
suicidarse, la realidad vuelve ante sus ojos con la fuerza de un camión
arrollador. Wayne dio su vida por unos últimos instantes de nostalgia y
libertad. Nunca cambió. ¿Podría Dexter?
Finalmente,
dos investigaciones avanzan, para desgracia de Dexter. LaGuerta sigue
adelante, reabriendo extraoficialmente el caso del Bay Harbor Butcher,
mientras que Miami Metro llega hasta el nombre de Viktor, el asesino de
Anderson. Al mismo tiempo, el duro, frío e intimidante jefe del
sindicato criminal ucraniano, Isaak, llega a Miami intentando descubrir
lo que ha ocurrido con su hombre. Sus duros y fríos ojos indican que no
se detendrá ante nada, y la sangre fría y violencia con la que asesina a
aquel que habló con la policía lo afirman.
"Sunshine
and frosty swirl" sigue estableciendo bases para la temporada, y desde
luego nos deja muchas promesas y ganas de verlas cumplidas. Por ahora
parece un gran acierto la incorporación del actor Ray Stevenson dando
vida al implacable Isaak, y que, sin necesidad de gritos o
gesticulaciones es capaz de mostrar a un duro y creíble criminal que
ciertamente impresiona.
Otro
detalle digno de mención es la gran cantidad de miradas al pasado que
estamos teniendo en estos capítulos. Recuerdos para el Ice Truck Killer,
el caso del Bay Harbor Butcher, menciones a Doakes y Lundy...
constantemente miramos atrás, señal de que nos encontramos en medio de
una trama en la que cada instante de la serie tendrá importancia.
También
es de justicia valorar los aspectos negativos, y en este caso son dos,
bastante relacionados con los positivos. Si bien Isaak parece un villano
que promete estar a la altura, si al final se confirma que la única
motivación de Louis es vengarse por lo del videojuego, sería bastante
decepcionante. Y entre todas esas miradas al pasado, resulta extraño que
Debra aún no haya atado cabos entre la "afición" de su hermano y la
muerte de Rita.
Pero, valorando
en conjunto, estos dos capítulos han sido un comienzo impresionante para
una temporada que promete estar entre lo mejor de la serie. Es una
situación nueva, completamente cambiada la relación entre Dexter y
Debra, y aunque viejos enemigos regresan, viejas heridas se reabren, hay
una sensación de frescura y novedad en cada paso. Además, el "enemigo"
de este año, Isaak, ha tenido un gran comienzo y parece muy acertado y
diferente al resto. Aún nos quedan 10 episodios por disfrutar, y seguro
muchas sorpresas.
COMPÁRTELO
que bien que aunque sea reviews de dexter hacen gracias... extrañaba reviews en esta pagina
ResponderEliminarGracias!!! En eso estamos, por lo menos por ahora Dexter y TWD, tendrán su RW
ResponderEliminarcon ansias esperare la de the walking dead :D
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