How I Met Your Mother 9x20-“Daisy”: Review

Por Alex Crespo.

Qué flores más bonitas son las margaritas. “Daisy” en inglés. Porque de eso va este capítulo, de una flor en una maceta. ¿Ah, que no va de eso? ¿Que es sólo para despistar? ¿Qué nos la han vuelto a colar? Malditos Bays y Thomas…

Daisy finalmente es el nombre del segundo retoño de Lily y Marshall. Estas habituales jugadas de llevarnos a creer una cosa para luego resultar ser otra completamente distinta me hace abrigar esperanzas para el final de la serie, y ya sabéis a lo que me refiero. Esta vez hemos tenido un capítulo con dos partes muy diferenciadas, con unos 15 minutos de pura comedia, y 5 minutos en los que de nuevo los sentimientos se nos ponen a flor de piel, con el anuncio del nuevo embarazo de Lily. Hacía mucho que no veíamos el gag de “Gracias Linus”, lo que ha resultado que su regreso me haya agradado, tanto como me exasperaba su repetición continua los primeros capítulos. Ya lo decía el maestro Billy Wilder, los chistes hay que espaciarlos a su ritmo adecuado. Y ahora entendemos cómo Lily no se ha cogido un coma etílico de proporciones siderales que lera lo lógico que debía suceder si esos combinados de Linus hubieran llevado el alcohol que presumiblemente contenían. La circunstancia del embarazo de Lily y la “investigación” de Ted dan pie además a realizar un repaso por alguno de los momentos de la temporada referidos al comportamiento de Lily que habían quedado más o menos en el aire, o cuya explicación en su momento había podido parecer cogida con pinzas. Y sobre todo, a una refexión que se pronuncia en el capítulo: la de cosas que han sucedido en apenas día y medio. Para ellos. Para nosotros, en a algunas veces demasiado largos 20 capítulos…

Soy muy fan del Ted pedante. Mucho. La comedia gana enteros cuando esa faceta suya hace aparición, esta vez en forma de su cacareado –y nunca demostrado- instinto detectivesco, que les lleva a los hombres de la panda (Ranjitt y el más-buenazo-que-el-pan Billy Zabka incluidos) hasta la mismísima mansión de El Capitán para una resolución de misterios a lo Agatha Christie, con todos los sospechosos reunidos en una sala mientras el detective expone su teoría de la forma más melodramática posible. Ted en esto lo borda, hay que decirlo. En lo de melodramático, porque lo que es sus habilidades de deducción no valen un pimiento. Por cierto, que ya pronostiqué que el coche que recogía a Lily era de El Capitán, así que mini-punto para mí (bueno, vale, en realidad mi apuesta era Mike, el padre de Lily, pero a El Capitán también lo mencioné entre los posibles candidatos ¿Cuela?). El mejor personaje de la flojísima sexta temporada da muestras de nuevo de su grandeza, con ese arranque musical con su personal de servicio a esa gallardía con la que encaja el puñetazo de Marshall. Por supuesto, yo creo que no está todo contado de lo que pasó esa noche para que Lily cambiara de idea. Dudo mucho que entrara en la mansión sólo para hacer pis en un tubito. Estoy seguro de que el propio Capitán le animó a que se quedase junto a su marido. Pero como vemos en ese flashforward, al final los Eriksenn-Aldrin al completo van a disfrutar de una temporadita en Roma. Eso sí, espero que no se acaben volviendo tan idiotas como aparentan en esa escena. Madre mía…

La madre de Robin, Geneieve, está interpretada por la cómica de origen británico Tracey Ullman, muy popular en la televisión estadounidense, y conocida entre nosotros porque en su programa se empezaron a emitir Los Simpson. Ya sólo por esa monumental aportación a la Historia de la Humanidad ya merece que nos quitemos el sombrero ante ella. Pero es que además sus escenas en el avión son hilarantes. Tampoco se queda corta con toda esa retahíla de “virtudes” de su ex marido antes de casarse, con el espanto que le produce a Robin darse cuenta de que reproduce exactamente los mismos patrones de comportamiento que Barney, con el miedo que supone que su matrimonio fracase igual que el de sus padres. Claro que ella siempre tendrá alguien en quien confiar, alguien que siempre estará allí, para ella, su pagafant… digoo su amigo del alma. Por supuesto ese alguien es y será Ted. O al menos eso es lo que nos quieren hacer ver al final del capítulo. Pero ya sabemos que en esta serie pocas veces las cosas son como parecen. También cada vez nos queda menos para conocer todo. Cada vez menos.