American Horror Story: Coven. Delphine LaLaurie: 'La Carnicera de Nueva Orleans'


Hace apenas unas horas, en este mismo blog, os informábamos acerca de los posibles personajes que, presumiblemente, veremos en la tercera temporada de la serie. Aunque es probable que nos encontremos ante un fake, entre los nombres de los personajes femeninos hay uno que destaca sobre los demás: Delphine LaLaurie, más conocida como 'La carnicera de Nueva Orleans': una despiadada asesina que, con sus continuos crímenes, escribió uno de los episodios más oscuros de la historia de América. Y, a su vez, la mansión LaLaurie es uno de los edificios más aterradores de Nueva Orleans y, por ende, de Estados Unidos. Tras el salto, y gracias a los sitios Mitos, monstruos y leyendas  y  Escrito con sangre, conocemos la aterradora historia de "La carnicera de Nueva Orleans" y las matanzas que realizó dentro de la mansión. Aviso: el contenido de este artículo contiene partes crudas que reflejan la realidad que sufrieron muchas personas bajo la amenaza de LaLaurie

Una vez conocida la historia, se nos antoja perfecta para la nueva temporada de la serie. ¿No creéis?


Delphine Marie Macarty nació en la ciudad de Nueva Orleans (Estados Unidos) en el año 1775. Sus padres, Barthelmy Louis Macarty y Vevue Lecomte pertenecían a la alta sociedad de la ciudad y eran unos prominentes miembros de la comunidad. Tanto es así que, de 1815 a 1820, su primo. Auguste Macarty, fue alcalde de la ciudad. Como toda familia adinerada de su tiempo,  poseían esclavos para antender su lujosa mansión en una céntrica calle de Nueva Orleans, Royal Street. Según relata la historia, Delphine era amable con los esclavos de raza negra en público y siempre se preocupaba por que estos gozasen de buena salud. Pero, pronto se comenzó a escuchar que, pese a lo que quisiesen hacer creer, muchas personas afirmaban que los esclavos se veían demacrados y miserables y que era la propia Delphine la encargada de maltratarlos. Pronto se envió a un abogado que informó a la mujer que, pese a ser esclavos, había leyes que debían seguirse con ellos. Aunque la realidad superó a cualquier bulo propiciado por sus vecinos.

Delphine se casó con Ramón de López y Angulo en 1800. Su esposo falleció en Cuba cuatro años después. En 1808, contrajo nuevamente matrimonio con Jean Blanque, un comerciante de esclavos que fallecería en 1816. Años más tarde, Delphine se casó en terceras nupcias con el médico Louis Lalaurie. Desde ese momento se conoció como "Madame LaLaurie".

Los primeros pasos.



Poco tardaron en surgir nuevos rumores acerca del trato que dispensaban los LaLaurie a sus esclavos. Siendo incluso la propia Delphine acusada de ser más cruel. En vez de hablarse de su alta posición económica que les permitía llevar una desahogada vida, los crecientes rumores se vieron confirmados con un  cruento suceso. 

En 1833, varios vecinos vieron como cometía un acto cruel. Una de sus esclavas, una niña que apenas contaba ocho años de edad se encontraba cepillando el pelo a Delphine cuando le dio un tirón a su cabello. Lalaurie golpeó a la niña que, aterrada, intentó escapar. La cruel ama la persiguió hasta la azotea de la mansión. Una vez que la apresó, arrojó a la joven muchacha a un patio interior. Tras comprobar que estaba muerta, Delphine ordenó a los demás esclavos que enterrasen el cuerpo de la menor en el jardín de la casa. Uno de los vecinos denunció estos hechos pero, tratándose de una esclava, la policía hizo caso omiso a este hecho. Sin embargo, un juez enterado de este crimen, y a consecuencia de la enemistad con el marido de Delphine, impuso una multa de 500.000 dólares al matrimonio y ordenó que todos los esclavos de los LaLaurie fuesen subastados y cambiados de familia. Por este hecho, el esposo decidió marcharse y nunca más se supo nada de él. 

Fue la propia familia de Delphine quién compró todos los esclavos y se los devolvió a la cruel mujer. Delphine comenzó así a descargar su ira y su frustración contra los esclavos y se convirtió en la carnicera que hoy conocemos.

Infierno.



Cadenas, arañas, heces... Cualquier cosa servía a Madame LaLaurie para infligir dolor a sus esclavos. Su cocinera permanecía durante las veinticuatro horas del día encadenada y era obligada a preparar la comida siempre atada a las cadenas. Al anochecer, la propia Delphine llevaba a la esclava con los demás esclavos y la mantenía encadenada en el cobertizo donde dormían.

Aunque la crueldad fue a más. Durante una mañana, ordenó que varios esclavos fuesen llevados al ático de la mansión desnudos y los mantuvo encadenados durante días. Después dejó de alimentarlos hasta la inanición. Ayudada por esclavos y capataces comenzó con sus prácticas de inusitada crueldad.

Bastaba con que ella sintiese que se aburría para poder disponer de sus "juguetes" a su antojo. La leyenda cuenta que, incluso, un día en los que los esclavos estaban encadenados, se valía de un palo para golpearlos fuertemente y disfrutar con ello. Si uno de los pobres esclavos moría, ordenaba que se enterrase en el jardín.

Sus hechos fueron perfeccionándose. Colgaba a sus víctimas del techo y los golpeaba con cualquier utensilio hasta que se hartaba. Encerraba durante largos días a sus presas en jaulas para perros y disfrutaba viendo como, debido a los calambres, sus esclavos gritaban de dolor, les arrancaba las uñas a las mujeres... 

Advertencia: desde aquí, el artículo pasa a ser enfermizo y tremendamente cruel.


Delphine LaLaurie continuaba ideando nuevas torturas para sus pobres esclavos. Queda comprobado que desollaba a las mujeres y, tras arrancarles la piel, fabricaba trajes con la propia piel de sus esclavos para después, y según ella misma relató, "poder disfrazarse de oruga". Cuando se le antojaba, ordenaba que abriesen la boca para introducirles arañas, gusanos u hormigas. O llenaba la boca de las víctimas de heces para después coserla.

Ella gozaba provocando sufrimiento a las personas. Empezó a arrancar los ojos de los esclavos, cosía los párpados y labios con aguja e hilo y, por si esto fuera poco, llegaba hasta el punto de amputar miembros: dedos, manos, pies, piernas... Mientras que las víctimas poco podían hacer por su vida, sus compañeros de tortura asistían atemorizados viendo como, uno a uno, eran descuartizados vivos.



Uno de los episodios más cruentos se producía cuando esta bestia operaba a sus "juguetes" y les cambiaba de sexo. Taladraba agujeros en las partes nobles de los hombres tras cercenar sus testículos. Algunos fueron decapitados para que ella pudiese apilar las cabezas y, en muchas ocasiones, llegaba a conservar corazones en jarras y los cerebros de los hombres, mujeres y niños en grandes cubos. Aunque su predilección era guardar la sangre y embotellarla después.

"Incluso llegó a abrir por el abdomen a una de sus esclavas, y, tras destriparla, ató los intestinos a las muñecas de la mujeres. Esto hacía que muriesen en medio de atroces sufrimientos. Después, convirtió a la mujer en un cangrejo al cortarle con un hacha sus piernas". Es la declaración de uno de los pocos esclavos que pudieron salir con vida del infierno LaLaurie.

El 10 de abril de 1834 el infierno abrió sus puertas.

El escenario descubierto.



Durante la mañana del diez de abril de 1834 se propagó un incendio en la cocina de la mansión. Se cree que fue la propia cocinera la que lo produjo para dar la voz de alarma de los crímenes que, diariamente, se cometían en el interior de la mansión. Los bomberos entraron a la cocina y, aparte de encontrar encadenada a la cocinera, vieron a otros dos esclavos que estaban con cadenas en una estufa. Alarmados, una cuadrilla buscó a LaLaurie y llegó hasta el ático. Allí encontraron un espectáculo dantesco. Muchos no pudieron evitar vomitar al ver tanta masacre y llegaron a desmayarse. Junto a cadáveres de esclavos, podían verse sus miembros amputados y docenas de esclavos que  pedían ser liberados de su dolor y morir. Pero Delphine logró escapar inmune de tales atrocidades. Mientras recorrían la mansión, la policía iba descubriendo cuerpos, trozos de carne humana y los particulares souvenirs de la carnicera de Nueva Orleans.

Huída y venganza.

LaLaurie huyó y se cree que, tras sobornar a un capitán de barco, logró huir con su familia e instalarse en Francia. En 1843 se publicó en prensa una noticia que afirmaba que la asesina había muerto un año antes rodeada de sus familiares y amigos. Claramente, los franceses desconocían el oscuro y siniestro pasado de la mujer. 

La casa fue saqueada y casi destruida. Pasó a ser residencia de vagabundos que, como en toda leyenda, decían que veían espectros, escuchaban gritos e incluso se hablaba de que, quién entraba a la vieja mansión. nunca salía de ella. Años. Un colegio sustituyó la casa ocupada por mendigos y, tras llevar un mes abierto, se decidió cerrar el centro. Esta oportunidad fue aprovechada por un magnate que vendió la propiedad al poco tiempo. Redecorada nuevamente, sirvió como alquiler de apartamentos. Pero todo aquel que viviese en la mansión contaba que se producían ruidos inexplicables, se escuchaban lamentos e incluso se veían formas extrañas en varias zonas del inmueble. Una vez que quisieron reformar la casa, llegaron a encontrar más de setenta cadáveres que, sin duda, eran víctimas de la carnicera.



En 2007 la mansión fue adquirida por Nicolas Cage quién la compró por 3.450.000 dólares y, siguiendo con la leyenda, en 2009, tras los mismos miedos que sus antecesores, el actor la puso en venta y una empresa la compró muy por debajo de su valor real, apenas 2,30 millones de dólares de los 3,5 que valía. Si queréis, podéis hacer un tour paranormal por la mansión. El precio, 15 dólares.

Filmografía y libros acerca de la historia.


Existen libros como "Madame Lalaurie" o "Fever season" de Barbara Hambla que cuentan esta historia.

Asimismo, os dejamos con dos reportajes que emitió el programa "Cuarto Milenio" en los que hablan acerca de esta cruenta historia real. El video que encontramos en youtube es de baja calidad, pero, disponéis de los programas íntegros en sitios como mitele.es y seriespepito.com. Aparte, claro está, de las páginas oficiales de Cuatro. (Temporada cinco).


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5 comentarios :

  1. Una historia más que macabra y muy interesante. Pegaría mucho con la nueva temporada de American Horror Story, si bien no tiene la temática de la brujería que parecería ser lo principal. Me interesó mucho este personaje, hasta me dieron ganas de leer uno de los libros que mencionaron sobre la vida de Delphine.
    Un pequeño detalle, por favor corrijan en el segundo párrafo de la sección "Infierno" en la que escribieron "llebados" en vez de "llevados".

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  2. Gracias Franco, hemos corregido el error. Muchísimas gracias por visitarnos y comentar nuestras noticias

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  3. Un autentico monstruo esta Delphine LaLaurie. Pero podria ser un argumento muy bueno para la tercera temporada de American Horror Story, ya que la historia es de lo mas macabra y fuerte.
    Esperando ansioso que empiece la nueva temporada de AHS.

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  4. DIOS!!! Lo mejor es que Kathy Bates encarnará a está malvada y asesina mujer, por supuesto eso que el que Kathy Bates la interpreta queda asegurado que quedará hecho una delicia.

    Ya quiero que sea Octubre.

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