Sons Of Anarchy 5x13 - “J'ai Obtenu Cette” [Season finale]: Review

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Por Alex Crespo: Pues hasta aquí hemos llegado. La quinta temporada de Sons Of Anarchy ha finalizado, y ahora nos queda juzgar si ha sido por todo lo alto o si por el contrario ha defraudado. Y os vamos a necesitar en los comentarios, porque creo que hay mucho que analizar. Entrad, abrid una cerveza y poneos cómodos, estáis en vuestra casa.

Vamos a quitarnos de en medio rápido lo que seguramente habrá sido más polémico de todo el capítulo: la muerte de Damon Pope. He de decir que a mí no me ha gustado cómo han gestionado este asunto. Me ha parecido un final demasiado rápido y anticlimático para una trama y un personaje que prometían mucho, pero que mucho más. Para alguien que durante la temporada ha demostrado que sabe planificar a largo plazo, la solución de Jax me ha parecido precipitada, y sobre todo, peligrosa. Porque lanzarte tú solo cual comando al rescate de Tig después de haberle entregado no me parece lo más sensato. ¿Y si Pope hubiese traído más hombres? ¿Y si le hubiese pegado un tiro a Tig allí mismo? Creo que como mínimo, Jax debería haber llevado a más Sons, que hubiesen estado ocultos por la zona por si se hubiesen necesitado refuerzos. Es decir, ¿te llevas a toda la caballería, Mayans incluidos, para lidiar con una simple banda de mexicanos, y no lo haces para ocuparte del tipo más peligroso con el que los Sons se han topado nunca? Mal resuelto por los guionistas. Pope merecía otro final, y creo que casi todos deseábamos que acabase de la misma manera que la hija de Tig, en un acto de justicia poética, en vez de con un simple tiro en la cabeza. 


Claro que ese tiro es la pieza del puzzle que Jax necesitaba para completar su venganza contra Clay. Porque si en el caso de Pope quedé defraudado, aquí sí que creo que se ha sabido llevar muy bien la trama. Una trama en la que Clay es definitivamente derrotado. Y no ha hecho falta matarle, no al menos de momento. Creo que para Clay, la traición es peor que la muerte. Y más si esa traición viene por parte de las dos únicas personas en las que podía confiar, los únicos que le quedaban. Porque Clay se ha quedado sólo. Absolutamente sólo. Encerrado en un furgón policial camino de la cárcel, acusado del asesinato de Damon Pope, merced al plan diseñado por Jax. La pistola que le regaló a Juice es la prueba incriminatoria, y Juice el colaborador necesario en su caída, por mucho que sus remordimientos le hiciesen avisar tardíamente a Clay para que huyera y evitase su detención por parte del Sheriff Roosevelt, quien ve cumplida así la promesa de Jax de entregarle al responsable último de la muerte de su esposa. Pero si la traición de Juice es dolorosa, para Clay el golpe mortal es la traición de Gemma. Nosotros la llevábamos esperando toda la temporada, pero para Clay ha sido como si le clavasen un cuchillo en todas las tripas. Esa mirada perdida suya demuestra que, como decíamos, la traición de la que siempre ha considerado el amor de su vida ha sido peor que cualquier muerte violenta imaginable. Porque ahora Clay es un cadáver ambulante. Tanto da que tenga una sentencia de muerte sobre la cabeza por parte de los secuaces de Pope (qué rápido acepta el segundo de Pope la versión de Jax, más aun cuando, como pronosticábamos, queda ahora como el nuevo rey del cotarro). Sin Gemma, sin el Club, sin los irlandeses, sin nadie, a Clay ya no le queda nada por lo que luchar. Ni siquiera creo que la venganza sea capaz de motivarle a partir de ahora.


Y si Clay es el derrotado, la que sale victoriosa del final de temporada es Gemma. Durante la mayor parte de la temporada hemos visto cómo ha sido vapuleada por los guionistas, preparando sin duda su resurgimiento. Porque si algo es Gemma es una superviviente nata. Por mucho que la creamos acabada, siempre se las apaña para salir adelante. Pero claro, estas cosas casi siempre es pasando por encima de alguien. Ya hemos visto cómo lo ha hecho con Clay. Y su otra víctima es Tara. En la batalla de las “old ladys”, en la que Tara parecía que se había impuesto, un gol en el último minuto le da el triunfo a la veterana. Porque finalmente no ha sido ni el Marshall Lee Toric (quien según Kurt Sutter tendrá u papel relevante la próxima temporada) ni Otto los que han llevado a Tara al calabozo. Hago un paréntesis aquí para comentar la jugada del JODIDO MANÍACO de Otto cortando su propia lengua de un mordisco: que levante la mano el que flipó con la escenita. Ya sabíamos que Otto estaba un tanto de la olla, pero hasta ese punto… Por lo menos, como dice el propio Sutter, ya no tendrá que aprenderse más líneas de diálogo.


Decía que quien ha acabado sacando provecho de las tribulaciones de Tara ha sido Gemma. Si algo sabemos es que a Gemma no hay que tocarle la moral con el tema de la familia. Ni de coña va a permitir que Tara se lleve a su hijo y a sus nietos de Charming, y ya sabemos que cuando Gemma amenaza con algo, lo cumple. Llamadita al sheriff y Tara al talego. Y en una brillante contraposición con el final de la temporada anterior, la última imagen nos muestra a Gemma de nuevo reinante en el seno familiar. La noticia buena de este final de temporada es que devuelve a Gemma al papel que nunca debió haber abandonado: el de principal villana de la serie. Toda gran película necesita su gran villano, y caído Clay en desgracia, ese papel le corresponde a la Gemma manipuladora, vengativa y ansiosa de poder que creo que la serie demandaba. Porque con el devenir de las temporadas, hay un detalle que parece que se nos ha olvidado: Gemma mató a John Teller. Si bien no fue la mano ejecutora, fue clave (y estoy seguro de que instigadora) en la conspiración que acabó con su marido. Y creo que en las temporadas que quedan, deberían retomar ese argumento.


Pero si en esta temporada hay un personaje quien al final más ha salido perdiendo, ese ha sido Jax. Pese a que pudiera parecer lo contrario, por su victoria sobre Clay, por resolver los problemas del Club y reforzar su presidencia, al final la imagen que me queda es la de un perdedor. Porque de tanto jugar a ser Michael Corleone, ha acabado igual que él: perdiendo a su familia. Y no ha hecho falta la intervención de Gemma para ello. La ruptura de la promesa que Jax le hizo a Tara de abandonar Charming cuando todo se hubiera solucionado ha causado un daño casi irreparable en la relación de la pareja. Por primera vez en toda la serie, Tara está dispuesta a hacer lo que tiene que hacer: coger a sus hijos y largarse a Oregón. Con Jax o sin él. Ella ha dado muchísimo más de lo que debía por Jax, y ahora se encuentra con que él no es capaz de hacer lo mismo por ella. Y esa es la forma más directa de perder a la persona que quieres. Porque sí, Jax ha triunfado como presidente de SAMCRO. Pero por el camino ha perdido a su mejor amigo, a su hombre de confianza (evidentemente Bobby dimite como VP), el cariño de uno de tus hombres (Juice, de quien espero que la próxima temporada los guionistas exploten el resentimiento contra Jax por obligarle a traicionar a Clay, porque ya cansa verle siempre con cara de perro apaleado), y sobre todo, ha olvidado quién era. Hemos constatado hasta qué punto corrompe ese mazo a quien lo porta, transformándole en otra persona, una que olvida que su prioridad es su familia. Ya lo vemos en la conversación con Nero Padilla: no quiere salirse, no es capaz de dar ese paso, el que él mismo se había prometido. La línea argumental de la temporada ha sido la caída Jax en el Lado Oscuro. Veremos si a partir de ahora es capaz de emprender el camino de la redención.


El final de la quinta temporada de Sons Of Anarchy deja sensaciones encontradas. Por un lado, “J'ai Obtenu Cette” ha sido un muy buen capítulo, con momentos de tensión, cierre de tramas y apertura de otras. Pero no ha sido todo lo grande que debía haber sido un final de temporada. Incluso creo que ese papel lo habían cumplido mejor capítulos como “To Thine Own Self” o el anterior “Darthy”. La sensación general es que la temporada ha ido de más a menos - estaba claro que iba a ser muy difícil superar el momento cumbre de la temporada, la muerte de Opie, cuando ésta ocurre en el tercer capítulo - manteniendo no obstante una nota media muy alta en todo momento. Y por favor, Sutter, de verdad, que no vuelva a aparecer Wendy. Es innecesario. Esa línea argumental sobra desde hace mucho tiempo. El Sons Of Anarchy Motorcycle Club Redwood Original nos deja todavía muchos asuntos por resolver en la sexta temporada, y aunque nos queda una larga espera hasta entonces, aquí os esperamos en septiembre para verlo juntos. Y mientras tanto, haced rugir vuestras motos

Y como no, no nos vamos sin escuchar la música del capítulo. Que curiosamente, se abre y cierra con canciones interpretadas por actores de la serie: 

Katey Sagal & The Forest Rangers - To Sir With Love
Brutal Jooks – Rich Man
Barcelona – Slipping Away
Los Rakas – No Problema
Ocha la Rocha - Westward
Bihlman Bros. – Lift Me Up
The Greenhornes – Too Much Sorrow
Vanessa Daou - Consequences
Jane’s Addiction – Sympathy For The Devil

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1 comentario :

  1. Personalmente, siempre pensé que Jax iba a matar o a vengarse de alguna forma de Pope, por el hecho de ser el responsable del asesinato de Opie. Ya que si hacemos memoria, Jax asesinó a todos los involucrados en la muerte de su amigo. Así que yo siempre esperé ese giro. Sin embargo, también me quedó la sensación de que pudo ser diferente...de que Pope se pudo haber ido de una manera más brutal o que la venganza pudo ser de otro tipo. Como fan de Tig, estoy contento de que no haya muerto, y de que Jax haya cambiado de opinión sobre su trato con Pope (Para mí, Jax siempre tuvo la duda si entregarle o no a Tig). Concuerdo contigo en que la serie fue de más a menos, ya que ha habido mejores finales de temporada.
    En fin...Buena review. No puedo esperar por la Sexta temporada

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